Impulsada
por una mayor contratación de mano de obra, más solicitudes de permisos de
edificación y por el incremento de la demanda de cemento, la actividad de la
construcción creció en nueve de las antiguas trece regiones del país durante el
primer trimestre de 2008, según el Índice de Actividad de la Construcción a Nivel
Regional (Inacor), elaborado por la
Gerencia de Estudios de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC).
De
acuerdo al Inacor -que en 12 meses totalizó una expansión a nivel nacional de
5,5%-, las regiones de La
Araucanía (13,4%), Los Lagos (13,1), Metropolitana (9,6%),
Valparaíso (8,3%) y O’Higgins (6,8%) lideraron la actividad sectorial con
expansiones mayores al promedio nacional, mientras que Tarapacá (5,3%), Maule
(5,2%), Atacama (3,9%) y Magallanes (2,2%), si bien registraron variaciones
positivas durante el primer trimestre del año, éstas fueron inferiores al
promedio sectorial.
La
cifra del primer trimestre de este 2008 fue valorada por el presidente de la CChC, Luis Nario, para quien
el sector ha enfrentado en buen pie las condiciones externas.
"Pese
a la volatilidad de los mercados internacionales, la construcción se mantiene
con buenas perspectivas. Sin embargo, es preocupante el constante aumento del
precio del petróleo y de los combustibles, así como el de la mayoría de los
insumos utilizados en la construcción.
Esta es una situación que la
Cámara ha venido advirtiendo desde hace tiempo y que ahora
está complicando a muchas empresas", señaló.
Crecimientos y caídas
No
obstante que la mayoría de las regiones presentaron un desempeño positivo, el
hecho de que La
Araucanía y Los Lagos se hayan expandido sobre los dos dígitos se
explica por la mayor demanda de cemento y por el aumento de la contratación de
mano de obra, la que se concentró en obras de infraestructura e ingeniería.
En
cambio, las solicitudes de permisos de edificación disminuyeron en ambas regiones
respecto del último periodo de 2007. Ello pudiera representar un llamado de
atención, puesto que de persistir esta tendencia podría traducirse en un
moderado crecimiento sectorial en ambas regiones, dado que el comportamiento de
los permisos de edificación suele anticipar estadísticamente la dinámica de la
construcción.
Para
las regiones de Tarapacá, Atacama, Valparaíso, O’Higgins, Maule, Magallanes y
Metropolitana, el común denominador que explicó la expansión fue el incremento
anual en todos los indicadores parciales de la construcción.
Las
alentadoras cifras del resto del país no se repitieron en las regiones de
Antofagasta (-9,8%), Coquimbo (-5,0%), Bío Bío (-7,8%) y Aysén (-11,2%). El
caso más representativo es el de Antofagasta, cuyo aumento en el índice de
despacho de cemento no logró amortiguar la contracción en el empleo sectorial y
las menores solicitudes de permisos de edificación.