Luto en el mundo minero. A los 81 años, este jueves falleció el exministro de Minería del Gobierno de Ricardo Lagos y exintendente de la Región de Antofagasta, Alfonso Dulanto Rencoret.
El ingeniero civil de la Pontificia Universidad Católica y destacado empresario chileno, dejó un importante legado en el mundo minero nacional, destacando entre sus principales hitos a la cabeza del ministerio, el Impuesto Específico a la Minería y el saneamiento financiero de la Enami.
Independiente pro-demócratacristiano, fue designado como intendente de la II Región en el 2000 y su gestión fue tan valorada, que posteriormente el Presidente Lagos lo nombró ministro en 2002, cargo que ocupó hasta el fin del Gobierno en 2006.
Tras su salida, dijo en entrevista con Diario Financiero que "pocas veces en un gobierno se ha hecho la cantidad de cosas que hicimos en minería".
"Algunas conflictivas con el sector privado y otras que fueron de consenso, como la política para la pequeña y mediana minería. Obviamente el impuesto específico a la minería fue un tema conflictivo, pero a la larga las empresas se van a dar cuenta que les hicimos un tremendo favor”, expresó en abril de 2006.
Apasionado por la metalurgia, al inicio de su carrera pasó por Codelco y también fue el fundador de la fundición Altonorte en Antofagasta, la que en 1998 vendió a la canadiense Noranda.
Volvió a la estatal en calidad de presidente del directorio, dado que en aquellos años ser ministro de Minería implicaba también ocupar dicho cargo en la cuprera, así como también en Enami, Enap y la presidencia del Consejo de Cochilco.
Al dejar la cuprera, manifestó en una carta: "Las históricas cifras de estos años -excedentes superiores a US$ 10.000 millones en el período 2000-2005- reafirman que Codelco es el mejor negocio con que cuenta Chile, y que como tal debe ser potenciado. No es, entonces, fruto del azar que Codelco sea la empresa más valorada por los ciudadanos, y que también haya consolidado su prestigio como el primer productor de cobre a nivel mundial".
Sus últimos años los pasó yendo y viniendo de su campo en Chillán, donde cultivaba arándanos.