Banco Central: la incertidumbre política y la inflación se consolidan como principales preocupaciones de las empresas en Chile

El ajuste de la economía chilena ya no solo se refleja en las proyecciones macro: las empresas también lo han empezado a sentir. Así lo reveló el Informe de Percepciones de Negocios (IPN) de mayo del Banco Central, en el que la mayoría de las firmas entrevistadas reporta una moderación de sus ventas en los últimos trimestres. Algunas mencionan una disminución de la actividad -como la construcción-, lo que se atribuye al aumento de costos y condiciones financieras más estrechas.  

Para el ejercicio se realizaron cerca de 55 entrevistas entre el 6 y el 25 de abril, y la encuesta online -aplicada entre el 18 y el 29 del mismo mes- consiguió 583 respuestas válidas. 

Las firmas plantean que la incertidumbre persiste, pero aclaran que el foco ha cambiado desde la pandemia y el proceso electoral: de las entrevistas se desprende que la incertidumbre político-legislativa se ha vuelto el principal factor de dudas para que las empresas concreten sus inversiones. 

Estas modificaciones preocupan particularmente a la construcción, agricultura, salmonicultura y minería, pero aclaran que la incertidumbre debería comenzar a disiparse en la medida que el proceso constituyente vaya llegando a su fin. 

De la mano de este nuevo foco de alerta, el IPN revela que las inversiones planificadas para ser ejecutadas este año subieron levemente desde octubre. Pero, menos de un 25% de las empresas reporta desistimientos en las inversiones planificadas originalmente para 2022, y menos de la mitad declara que dichas inversiones se encuentran en evaluación. 

El reporte alerta que “la falta de seguridad sobre la concreción de estos proyectos es similar a la que se observaba a esta misma altura de año para la inversión de 2021, momento en que la evolución de la pandemia era el principal factor de preocupación de las empresas”. 

Precios en la mira

El reporte también revela que los precios de venta han seguido aumentando, y la percepción sobre los márgenes de ganancia continúa deteriorándose por el aumento de los costos, lo que ha llevado a que más de la mitad de las firmas se declare insatisfecha o muy insatisfecha con ellos. 

El informe detalla que esto ocurre cuando, en algunos sectores, el traspaso de costos a precios ha comenzado a reducirse ante señales incipientes de estancamiento de la demanda, a lo que se suma que los problemas para contratar nuevos trabajadores se mantienen elevados, pero con una leve disminución desde enero. 

Para el próximo trimestre las firmas esperan un menor desempeño, en línea con un escenario en el que la economía se iría desacelerando, sobre todo desde mediados de año. En tres meses más siguen visualizando una persistencia de las presiones de costos, y una estabilización en la disponibilidad de insumos y materias primas. 

También se contempla un debilitamiento de la demanda, que contribuirá a la desaceleración de los precios de venta. De hecho, las firmas contemplan que los márgenes de ganancia seguirán estrechándose en el corto plazo, pero que tenderán a estabilizarse a futuro. Puntualmente, casi un tercio de las empresas consultadas prevé que la estrechez de márgenes resultará en mayores aumentos en los precios de venta para los próximos seis meses. 

Los entrevistados ponen una nota de alerta sobre la evolución de los problemas logísticos globales y de las presiones de costos, sobre todo los por efectos del conflicto Rusia-Ucrania y los confinamientos en China.

Hacia más adelante, la mayoría de las empresas estima que la inflación esté muy por sobre lo normal en doce meses, lo que representa un aumento significativo desde la medición de febrero. Pero, “una parte importante de las empresas entrevistadas no declaran que la inflación sea una de las principales preocupaciones de su negocio en este momento, aunque sí reconocen las dificultades que implica para el bienestar de los consumidores y que su persistencia podría afectar el desempeño futuro de sus negocios por el impacto en la demanda”, se lee en el IPN.

Cambio climático

De forma excepcional, el Central decidió consultar a las firmas sobre lo que están haciendo para enfrentar el cambio climático y sus percepciones sobre el fenómeno. La mayoría de las firmas expresan “altos niveles de preocupación” acerca de las consecuencias del cambio climático, siendo los problemas asociados a la sequía y desertificación los efectos que más preocupan, y que consideran que pueden ser un problema relevante para su actividad.

“La gran mayoría de las empresas ya ha tomado o espera tomar alguna medida de adaptación frente al cambio climático durante los próximos dos años, orientadas a reducir los efectos que éste podría tener en su desempeño”, dice el documento. Pero acota que una proporción “bastante menor” está implementando acciones de mitigación adicionales a lo que exige la ley, con el fin de moderar el impacto que sus propias actividades tienen sobre el medio ambiente. 

Así, las medidas de mitigación que lideran entre las firmas se enfocan sobre todo en la adopción del reciclaje de los desechos producidos por sus actividades, o en el uso de insumos sustentables o de energías renovables para su proceso productivo.