Un llamado a abstenerse de viajar a Japón hizo hoy el ministro de Relaciones Exteriores, Alfredo Moreno, quien además presentó tres alternativas a los chilenos que viven en la isla para retirarse de las zonas más afectadas por el terremoto y el posterior tsunami, como también quienes se sienten amenazados por la alarma radiactiva de las centrales nucleares de Fokushima.
“Hago un llamado a todos los chilenos a abstenerse de viajar a Japón a menos que sea estrictamente necesario”, concluyó el ministro Moreno, quien agregó que "también a los compatriotas que viven en Japón, les aconsejamos desplazarse hacia el sur de Tokio”. Luego de ello, el secretario de Estado presentó las tres alternativas que les ofrece el gobierno chileno a los residentes en la isla nipona.
La primera alternativa se relaciona con aquellos chilenos que no quieren dejar Japón, por lo que el gobierno chileno les ha sugerido trasladarse hacia el sur por vía terrestre. En este punto el canciller Moreno fue enfático: “Si los chilenos no tienen dinero para desplazarse, deben comunicarse con Cancillería”.
El segundo plan que presentó el gobierno para los chilenos residentes en Japón está destinado para quienes quieren retirarse de la isla nipona de manera definitiva; para ello y con ayuda del gobierno colombiano, se dispondrá de un avión que arribará hoy a Tokio y que traerá a los compatriotas hasta Bogota, para luego ser desplazados hasta Santiago por la aerolínea LAN.
Por último, el gobierno dispuso de un plan para aquellos chilenos residentes de las zonas afectadas por el terremoto y la alerta de radiación, que consiste en trasladarse –también con la ayuda del gobierno de Colombia- hasta Seúl, Corea del Norte, donde se dispondrá también de alojamiento para las familias que no puedan mantenerse en el lugar por razones de dinero. La medida considera la vuelta de los compatriotas a Japón una vez que la situación se normalice.
Situación de chilenos en Japón
Moreno también se refirió a los chilenos residentes en Japón, que totalizan 135, de los cuales 126 ya fueron ubicados -esto considerando las consultas de parientes llegadas a Cancillería- por lo que se concluye que aún quedan nueve compatriotas sin ubicar, pero que no viven en los sectores más afectados del país nipón.
Ahora bien, con respecto a los tres chilenos que vivían en las inmediaciones de los sectores más afectados por el terremoto y tsunami del pasado 11 de marzo, Hortencia Vargas, Sandra Medina y su hijo Takashi, no se ha tenido contacto, pero fuentes indirectas afirman que estarían con vida y en buenas condiciones, según afirma el canciller Moreno.