Sobretasa a bienes raíces de alto valor supera las expectativas y el 70% de lo recaudado proviene de grandes empresas

A fines de febrero se cumplirán dos años desde la entrada en vigencia de la Ley de Modernización Tributaria, aprobada tras un acuerdo entre el gobierno, el oficialismo y la oposición en medio de la crisis social de octubre del 2019.

Pasados casi 24 meses de su puesta en marcha, ya es un momento para realizar un balance de algunas de las medidas recaudatorias que creó la nueva normativa.

Una de ellas es la sobretasa a las contribuciones de bienes raíces (también conocido como impuesto territorial) para las propiedades caras, una de las medidas para gravar a los altos patrimonios que logró destrabar el proyecto tributario a inicios del 2020.

Según cifras del Servicio de Impuestos Internos (SII), en sus dos primeros años de vigencia el recargo a las contribuciones ha superado las expectativas, al permitir el ingreso a arcas fiscales de US$ 385 millones (equivalentes a cerca de $ 331.000 millones).

Esto, en circunstancias que el informe financiero de la norma, elaborado por la Dirección de Presupuestos (Dipres), proyectaba mayores ingresos por US$ 260 millones gracias a este ítem entre 2020 y 2021.

Lo recaudado se explica por las propiedades asociadas a 58.931 RUT, tanto de personas naturales como jurídicas.

Durante 2020, se percibieron más de US$ 187 millones (alrededor de $ 161.000 millones), en circunstancias en que la meta eran US$ 128 millones.

Mientras que con cifras a noviembre de 2021, ingresaron al Fisco US$ 198 millones (más de $ 170.000 millones), con una meta que ascendía a US$ 132 millones.

“La sobretasa del impuesto territorial muestra resultados positivos en materia de recaudación, lo que resulta especialmente relevante en la actualidad”, destaca la subdirectora de Avaluaciones del SII, María Alicia Muñoz.

Incluso, precisó, solo en su primer año de implementación (en 2020), se logró recaudar más de $ 161.000 millones, equivalente al 93% del total girado en el periodo.

El peso de las grandes

Las cifras del servicio muestran que tanto para 2020 como en 2021 cerca del 70% de lo recaudado por la sobretasa proviene de RUT relacionados a grandes empresas.

En específico, para el primer año de vigencia 5.001 RUT de este segmento explicaron el 70% de lo ingresado, pese a representar apenas el 9,8% del total de contribuyentes.

Mientras que en el ejercicio recién concluido, 5.146 RUT de grandes corporaciones fueron gravados con la nueva tasa, representando el 70,6% de los montos recaudados, a pesar de corresponder a solo el 9,1% de los contribuyentes.

Para ambos ejercicios, la mayor proporción de afectos a la sobretasa corresponde a personas y pequeñas empresas (ver tabla).

“Lo que buscamos como servicio es que cada persona aporte de manera justa y equitativa a la recaudación fiscal y el pago de esta sobretasa de la Ley del Impuesto Territorial así lo demuestra”, realza Muñoz.

En el SII enfatizan que del total de contribuyentes que pagan sobretasa, 9.009 de ellos cuentan con más de 20 propiedades a las que se les aplica esta nueva obligación.

Para determinar la sobretasa, la entidad dirigida por Fernando Barraza realizó el análisis sobre más de 8,5 millones de bienes raíces enrolados, que se encuentran asociados a más de 10,2 millones de RUT.

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¿Dónde se recauda?

En línea con la tendencia del pago general de contribuciones a nivel país, la Metropolitana lidera tanto en montos como en número de contribuyentes afectos a la sobretasa, con más de un 60% de participación en ambos años respecto al total y de más del 75% de lo ingresado en 2020.

Eso sí, con cifras a noviembre de 2021, la tendencia al menos en recaudación se modifica, ya que Atacama arremetió como la región donde los contribuyentes más pagaron la sobretasa, seguido de Magallanes y recién en tercer lugar la Metropolitana (ver tabla).

Eso sí, el SII enfatiza que la región corresponde al domicilio informado por los contribuyentes, por lo que no representa, necesariamente, la región en la que se encuentran ubicados los bienes raíces.

Muñoz señala que este año desplegarán esfuerzos de fiscalización para la correcta identificación de los contribuyentes afectos.

“Como servicio, continuaremos avanzando en este trabajo, revisando aquellas propiedades cuyo avalúo es cercano al límite del pago de esta sobretasa, con el objetivo de descartar posibles desactualizaciones del catastro y asegurar que la sobretasa se aplique efectivamente a los bienes raíces que correspondan”, anticipa la subdirectora.

Cómo se calcula y quiénes están afectos al recargo

La base imponible para calcular esta sobretasa es el avalúo fiscal total, correspondiente a la suma de los avalúos de los inmuebles de un mismo contribuyente, según su valor fiscal al 31 de diciembre del año anterior. Tratándose de bienes raíces en donde se tiene una cuota del dominio (es decir, es propietario de un porcentaje del bien raíz) se considera únicamente la proporción en el avalúo fiscal equivalente a la cuota de dominio que le corresponda.

Para la determinación de la base imponible se considera la suma de los avalúos fiscales totales.

La sobretasa se aplica en forma marginal, considerando tramos que parten en un avalúo fiscal sobre las 670 UTA ($ 398.968.920) con tasas que oscilan entre 0,08% y 0,275% según el tramo correspondiente (ver tabla).

Esta sobretasa no considera los bienes raíces de contribuyentes que tributen en el régimen especial para ProPymes General 14D, respecto de los inmuebles, o parte de ellos, que sean destinados al negocio o giro de la empresa. Tampoco están sujetos a esta sobretasa los bienes raíces en que inviertan los fondos de pensiones.

La sobretasa se empezó a aplicar en 2020, considerando los bienes raíces inscritos a nombre de los contribuyentes al 31 de diciembre del año 2019.

En cuanto a su pago, se realiza en cuatro cuotas con vencimiento en los meses de abril, junio, septiembre y noviembre, habiéndose calculado al primero de enero de cada año.

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