Reforma tributaria: Pymes se rebelan contra propuesta de subir impuesto corporativo y piden tratamiento diferenciado para el sector

Continúan las reacciones luego de que los empresarios reflotaran su idea de aumentar el impuesto a las utilidades corporativas (Primera Categoría) a cambio de no continuar avanzando en el impuesto a la riqueza en el marco de la reforma tributaria.

La idea ha sido recibida de manera tibia por parte del ministro de Hacienda, Mario Marcel, al igual que los partidos oficialistas y los expertos.

Pero donde se ha percibido la reacción más dura ha sido entre los gremios de pequeñas y medianas empresas (Pymes), ya que advierten que un incremento en la tasa corporativa podría terminar afectando -directa o indirectamente- al sector, a través de una mayor tributación a las pequeñas sociedades o mediante el impacto de una menor inversión y crecimiento económico.

Por lo mismo, gremios como la Asociación de Emprendedores de Chile (Asech), la Confederación Nacional de Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Conapyme), la Multigremial Nacional, la Unión Nacional de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Unapyme) y la Convergencia Nacional de Gremios Pymes y Cooperativas, piden que se considere un régimen especial para las pequeñas sociedades para eximirlas de un eventual mayor carga fiscal.

El presidente de Asech, Jorge Welch, dice que el impuesto al patrimonio y a las utilidades acumuladas "no es neutral" para los emprendedores, ya que se trata de un impuesto al stock y no al flujo de efectivo. "Las startup, cuya valorización puede lograr cifras importantes, se verán afectadas negativamente con este impuesto, limitando los incentivos para potenciar en Chile empresas de la nueva economía”, asegura.

Asimismo, enfatiza que “antes de presionar por aumentar la recaudación vía impuestos, el gobierno debe dar una señal potente por el buen gasto público, reduciendo el excesivo gasto fiscal en programas mal evaluados”.

La presidenta de Unapyme, Gianina Figueroa, señala que le parece "muy bien" aumentar el impuesto a las empresas, especialmente a las cerca de 150 que -dice- facturan el 50% de las ventas del país, "lo que es coherente con las demandas ciudadanas y con la prosperidad que necesitan de las grandes mayorías".

Sin embargo, plantea que el incremento no debe ser plano ni dejar de considerar a las pequeñas compañías. "Es para nosotros de toda lógica seguir solicitando que la nueva reforma tributaria no afecte aún más nuestra participación en las ventas totales. Más bien, se debe focalizar en quienes más ganan y valorizar de manera distinta el aporte social, laboral y de distribución del ingreso que las Pymes dan en nuestro país, cuidar su desarrollo y poner énfasis en su sano crecimiento".

El vicepresidente de la Conapyme, Héctor Sandoval, señala que el gremio "no comparte en absoluto" el planteamiento de la CPC, sobre todo porque la idea no ha sido consensuada con el sector ni con el gobierno.

"Acá no se ha conversado con las Pymes, excepto con algunas que tienen ideas afines al gobierno, sin considerar a quienes tenemos plena autonomía. Con esto de aumentar el impuesto corporativo, pasaríamos a ser uno de los países con la tributación más alta en la OCDE. Se puede decir que las Pyme tienen su régimen especial, pero tiene muchas restricciones para que accedan las pequeñas compañías y esto sin duda las va a dañar enormemente. Finalmente la cuenta la pagan las Pymes", complementa.

El titular de la Multigremial Nacional, Juan Pablo Swett, considera "imprudente" aumentar el gravamen corporativo como proponen los empresarios, ya que "no estamos hablando solo de las grandes compañías que tienen las espaldas suficientes para aguantar un impuesto adicional, estamos incluyendo a las micro, pequeñas y medianas que apenas subsisten y que están poniéndose de pie tras la pandemia".

Así, recalca que si se termina avanzando en esta idea, propone que el incremento se aplique "de manera diferenciada, solo a las grandes empresas, que son las que pueden sostener ese incremento".

El presidente de Convergencia Nacional de Gremios Pymes y Cooperativas, Eduardo del Solar, complementa que las empresas de menor tamaño como las Pymes se verían "afectadas" con una mayor carga tributaria, la que ya se ha visto incrementada -dice- en los últimos años.

"Pensamos que deben pagar quienes tienen un alto patrimonio, lo que ayudaría a recaudar una gran cantidad de recursos y no se afectaría el empleo en tiempos de crisis”, asegura.

Empresarios se reúnen en los próximos días

Entre las seis ramas de la CPC -minería, comercio, industria, agricultura, construcción y banca- están conscientes de que la propuesta del sector no ha generado todo el consenso necesario. Y no solo a nivel del gobierno y los expertos, sino al interior de la misma multigremial.

Fuentes que conocen la interna tanto de la comisión como de los gremios empresariales, señalan que la propuesta definitiva de aumento de impuesto corporativo aún no está zanjada y que generó cierta incomodidad que el timonel de la CPC, Ricardo Mewes, adelantara la semana pasada un trabajo que aún no está definido.

Esto ya que al interior de algunos gremios no ven con buenos ojos continuar aumentando el impuesto a las empresas, que ya se ha incrementado en siete puntos porcentuales desde 2010, lo que podría terminar afectando el crecimiento y la rentabilidad exigida a los proyectos de inversión.

Se prevé que a fines de la próxima semana la comisión tributaria de la CPC vuelva a reunirse por primera vez desde el receso estival, para abordar las fórmulas específicas y también discutir las reacciones de parte del mundo político, técnico y de las Pymes.

El presidente de la instancia es el abogado tributarista Christian Blanche y la integran Luis Felipe Ocampo, (SNA), Christian Aste (CNC), Francisco Costabal (Sonami), Alejandro Arriagada (Sofofa), Rodrigo Mujica (Sofofa), Eduardo Torretti (Sofofa), Camila Ramos (CChC), Javier Hurtado (CChC), Gonzalo Bustos (CChC), Germán Torres (ABIF), Juan Sutil (CPC), Fernando Alvear (CPC), Javier Irarrázaval (CPC), José Tomás Morel (Consejo Minero), Loreto Pelegrí, Mario Silva, Luis Catrilef, Carlos Boada, Tomás Kovacevic, Juan Pizarro, Gabriela Clivio y Patricio Arrau.

El presidente de la Comisión Tributaria del Colegio de Contadores, Juan Alberto Pizarro, propone que las Pymes tributen en un régimen especial, donde solo se les aplique una tasa de 15% cuando retiren utilidades.

"Las Pymes requieren una tasa corporativa de impuesto renta competitiva en forma permanente. Una tasa de 25% le resta competitividad al sector, que se financia mayoritariamente con la reinversión de sus propios recursos. Se puede pensar en una tasa permanente de 15% a las utilidades, una tasa que es muy cercana a la tributación integrada de impuesto renta y Global Complementario", señala el también integrante de la comisión tributaria de la CPC.