Hacienda se juega sus cartas y analiza nuevas compensaciones para salvar la integración en el Senado

La arremetida de los senadores oficialistas, principalmente de Renovación Nacional, que le solicitaron al ministro de Hacienda, Felipe Larraín, abrirse a negociar la integración del sistema impositivo -el denominado "corazón" de la reforma tributaria- tomó por sorpresa a los inquilinos de Teatinos 120, pero consideraban que era algo inevitable "dados los tiempos" políticos actuales.

Cercanos a las tratativas aseguran que la ofensiva de RN era coherente con la señal que dio el fin de semana el ministro del Interior, Andrés Chadwick, quien en Estado Nacional de TVN aseguró que no había un "dogma" con la integración del sistema, lo que fue interpretado como la primera señal de apertura del Ejecutivo a modificar el centro del proyecto impositivo.

Más allá de que Chadwick se retractó el lunes tras participar en el Comité Político en La Moneda, cercanos al trámite del proyecto impositivo ven detrás de los últimos hechos una señal de molestia de parte de un sector del oficialismo que busca que el Ejecutivo lo tenga "más presente" a la hora de negociar las nuevas compensaciones que se están analizando para "salvar" la integración en el Senado.

Claros de que si bien fue un "gran logro" haber superado la valla de la Cámara de Diputados con la integración, en el gobierno hay conciencia de que el escenario en el Senado es complejo debido a que la oposición está "más alineada" que en la Cámara.

Por lo mismo, hace alrededor de un mes los técnicos de Hacienda, la Dirección de Presupuestos y del Servicio de Impuestos Internos (SII) iniciaron el trabajo, coordinado por el ministro Larraín, para ver espacios de ajuste para "ir más allá" en las compensaciones que ya se entregaron en el primer trámite.

Opciones sobre la mesa

Fuentes cercanas aseguran que se analiza retomar algunos puntos que se desecharon durante el trámite en la Cámara, como por ejemplo que tributen las ganancias derivadas de las rentabilidades de seguros con ahorro.

Durante las negociaciones con la oposición en la Cámara en marzo, Hacienda planteó esta idea como un "ejemplo" de posibles compensaciones, pero finalmente no se incluyó en el proyecto. Dicha medida recaudaría US$ 52 millones por año en régimen. El SII se encuentra actualmente en un litigio en la Corte de Apelaciones con las aseguradoras, las que advierten un cambio de criterio de parte del servicio para cobrar impuestos por dichos rescates.

Entre el abanico de opciones se considera también incluir impuestos a algunos "males", como por ejemplo a productos altos en azúcar. Dicha idea fue analizada antes de que el Ejecutivo presentara la reforma en agosto del 2018, pero finalmente no fue incluida en el proyecto definitivo.

Otra opción es realizar más ajustes a los impuestos verdes, aprovechando la coyuntura de la COP25 que se realizará en el país a fin de año. Si bien el proyecto ya incorpora un ajuste al gravamen a las fuentes fijas contaminantes, lo que se analiza es aplicar un impuesto más alto a la emisión de dióxido de carbono (CO2).

En la Cámara, Hacienda puso como ejemplo de compensación aumentar el gravamen por cada tonelada de CO2, lo que recaudaría US$ 50 millones por cada dólar de emisión. Sin embargo, en dicho momento la medida fue desestimada, ya que se había logrado "con holgura" superar la meta de US$ 400 millones de costo de la integración a compensar.

Otra idea que emerge como alternativa es desechar cambios profundos a la Norma General Antielusión (NGA), uno de los tópicos más resistidos por la oposición. En el Ejecutivo habría un cierto nivel de tranquilidad con lo aprobado por la Cámara de Diputados y, en vista del fuerza rechazo de la exNueva Mayoría, se analizarían ajustes menores.

Presupuesto y regiones

En Hacienda están conscientes de que el trámite de la reforma inevitablemente estará cruzado con el despacho del Presupuesto 2020. En esa línea, una opción que se analiza es incluir ajustes en recursos de cara al próximo año para en paralelo destrabar el proyecto impositivo.

Otro espacio de negociación serán los recursos en inversiones para las regiones y la Ley de Rentas Regionales y Responsabilidad Fiscal que el Ejecutivo presentará a más tardar el 31 de octubre.

Junto con establecer mecanismos para que las regiones puedan manejar con mayor autonomía sus erarios, la cartera también analiza modificaciones a la contribución del 1% del valor de los proyectos de inversión en favor de las regiones donde se desarrollan las iniciativas. Si bien en la Cámara se establecieron mecanismos de compensación para evitar una concentración de recursos en las zonas más intensivas en proyectos (como el norte minero), en el Ejecutivo ven margen para avanzar más en esa línea.

Fuentes al tanto aseguran que no hay una decisión tomada aún respecto a qué compensaciones incluir en las indicaciones a la reforma, ya que la decisión dependerá del presidente Sebastián Piñera y el ministro Larraín. Se espera que entre noviembre y diciembre la comisión inicie la votación en general de la reforma.