Eyzaguirre: movimientos sociales tienen que ver con la demanda de equidad
El ex ministro de Hacienda se refirió al descontento generalizado de la ciudadanía con un sistema que ha permitido enormes riquezas a un grupo muy reducido de personas, generado “costos brutales” a un grupo importante de la sociedad en materia de empleo.
- T+
- T-
El director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Hemisferio Occidental, Nicolás Eyzaguirre, analizó en profundidad con Diario Financiero los movimientos sociales que han sacudido al mundo y a Chile en los últimos meses.
En ese contexto, el ex ministro de Hacienda se refirió al descontento generalizado de la ciudadanía con un sistema que ha permitido enormes riquezas a un grupo muy reducido de personas, generado “costos brutales” a un grupo importante de la sociedad en materia de empleo y con la sensación de que no hubo castigo para los responsables.
En relación a la situación regional, el experto toma las palabras del presidente de Colombia, José Manuel Santos, respecto de que las protestas en Chile pueden ser el inicio de un movimiento generalizado en otros países y cuyo norte sería la demanda de mayor equidad.
- ¿A qué obedece a su juicio, esta indignación global?
-Los distintos movimientos sociales que existen en el mundo obedecen a causas muy distintas. Si bien es cierto hay una coincidencia, uno tendería a tratar de ponerle el mismo apellido, pero son re distintos. El problema árabe con sociedades que han ido progresando lentamente, que han crecido, pero que son controladas por una elite con bajísima participación, casi con ausencia de democracia, con mucha corrupción, tiene que ver con una primera demanda esencial de libertad. Los seres humanos buscamos muchas cosas, además de nuestra felicidad familiar, buscamos un poco de seguridad, tranquilidad económica pero también necesitamos expresar nuestras ideas, sentir que los gobiernos consideran lo que son nuestras opiniones y finalmente, cuando los países están carentes de expectativas porque la situación económica está muy mala porque han vivido muchos años estancados, esas cosas están subsumidas. En la medida que el miedo a la inestabilidad económica de alguna forma, desaparece porque la sociedad se equilibra un poco más, estoy hablando del tema del Medio Oriente, las demandas por una sociedad que tenga más libertad, aparecen.
Eso, no tiene nada que ver con la exposición de las clases medias, que es de alguna forma de clase emergente, son países en promedio más pobres que nosotros, pero que tienen una demanda por participación democrática, básicamente, porque hay un mínimo de transparencia en la forma en que se conducen las políticas del Estado. Eso coincide con el problema de los países industriales que están con una crisis gigantesca en que, por primera vez, es posible que la generación que viene no esté mejor que la anterior, en circunstancias que estos países en los años ´50 tuvieron una explosión de crecimiento económico y estaban muy acostumbrados a que las perspectivas de los hijos fuera mucho mejor que la de los padres. Llevamos 10 años prácticamente con un crecimiento magro tanto en Japón como en Europa, como en EEUU y vamos a completar por lo menos el quinquenio en una situación de ese tipo. Entonces, hay una crisis que son de US$ 40 mil per cápita, que tienen que ver con la falta de perspectivas.
La crisis de Chile que de alguna forma, como lo dijo el presidente de Colombia, es una especie de indicador anticipado de lo que posiblemente van a sufrir otros países latinoamericanos, tiene que ver con que primero Chile y después otros países, han convergido hacia estrategias económicas más estables producto de lo cual el crecimiento latinoamericano de los últimos seis años ha sido bueno, la inflación está controlada y están pasando a niveles de ingresos medios y la gente está empezando a demandar cuestiones que más temprano o más tarde, iban a aparecer, que tiene que ver con temas de equidad. Por eso digo que las tres cosas no tienen nada que ver.
-¿Tienen que ver con el poder de la elite a la que Ud. se refiere?
- Es un buen punto de unión entre las tres crisis, pero en niveles súper distintos. Yo vivo en EEUU y me toca supervisar EEUU y los niveles de accountability o control que la sociedad ejerce sobre las autoridades políticas y económicas es infinitamente superior a los países medios y a su vez, nosotros tenemos niveles de accountability sobre nuestros gobiernos en rendición de cuentas muy superiores a los que tienen los países árabes. Cada uno en su nivel, llegó a un punto en que la sociedad se cansa con la forma en que se toman las decisiones porque al final ellos pagan los costos.
En el caso de EEUU claramente este movimiento de Wall Street tiene que ver con cómo el sistema financiero se ha desregulado, ha generado riquezas inverosímiles una cierta concentración del ingreso en EEUU y al final le ha implicado a la sociedad costos brutales en términos de desempleo, pérdida de riqueza y la sensación de que quienes estuvieron detrás de esto, han salido impunes.
El movimiento de Europa no tiene que ver con eso. Europa lo que tiene son varios problemas, muchos de los países cuando se produce la Unión Europea, por así decir, unen el nivel de aspiraciones pero no necesariamente el nivel de productividad que puede sostener esas aspiraciones. Entonces, básicamente aquí lo que ocurre para decirlo en una palabra, es que conforme se abre la UE y el euro es moneda común los países distintos del centro de Europa que es Alemania y Francia, se sienten protegidos por este Banco Central común y las tasas de interés que en países como Grecia, Portugal y otros eran de dos dígitos caen a 4% y 5% con una sensación de protección por la moneda común y eso produce un espiral de gasto, un acceso a recursos financieros no conocida antes . Hago un paralelo de lo que nos pasó a nosotros a fines de los 70, comienzo de los 80 que hubo por diversas circunstancias, por la crisis del petróleo una gran abundancia de recursos financieros, Chile abrió la cuenta de capitales, llegaron capitales como locos, la gente se endeudó, gasto y después pasó la cuenta. Lo que pasa es que a veces por acción del sector privado, a veces por acción del sector público, por acción de ambos los países gastaron más de la cuenta, los españoles, los portugueses, los irlandeses que es un caso distinto que es una falta de supervisión del mercado financiero, y hoy día llegan a que tienen que pagar la cuenta en circunstancia que los niveles de competitividad de las distintas economías son súper distintos, y tienen una moneda común por lo tanto no pueden mejorar su competitividad sobre la base de devaluar su moneda. Entonces, tienen que buscar fortalecer su competencia no por la vía de la devaluación sino por la vía de ser más eficiente y eso es un proceso que cuesta tiempo. De alguna manera están pagando el haber llevado niveles de vida que permitió durante algún tiempo esta falsa sensación que eran todos iguales.
Yo no diría que fundamentalmente es una rebelión de los ciudadanos contra la forma en que las autoridades toman las decisiones, sí quizás de la falta de supervisión del sistema financiero siendo éste más supervisado en Europa que EEUU y una cierta sensación que los gobernantes no le pusieron atajo a esta especie de fiesta insostenible que se produjo en virtud del despliegue del sector financiero, pero no diría que son los mismos males que hay en EEUU.