Las nuevas tecnologías que está incorporando la industria solar para aumentar su competitividad

Chile cuenta con un gran potencial para el desarrollo de la energía solar, por las características de la geografía en el norte y los niveles de radiación del desierto de Atacama. Un escenario que ha propiciado que a la fecha, el país tenga una capacidad instalada cercana a los 3.840 MW en solar, a abril de 2021.

El crecimiento de esta industria también está siendo apalancado por el desarrollo e incorporación de nuevas tecnologías para hacer más eficiente la generación y reducir los costos de producción de energía solar. De hecho, expertos señalan que Chile, dado su potencial, se ha posicionado como uno de los mercados más atractivos para el desarrollo y experimientación de nuevas tecnologías solares.

Entre las innovaciones locales e internacionales en fase de investigación o que ya se están utilizando, se cuentan paneles fotovoltaicos bifaciales, inteligencia artificial y tecnologías robóticas para limpieza de paneles.

Incluso, grandes centrales fotovoltaicas han instalado labotatorios en sus plantas para probar tecnologías que luego comercializan al resto del mundo. Un ejemplo es Acciona, que instaló un Hub de Innovación en la Planta Fotovoltaica El Romero Solar en la región de Atacama, para caracterizar y testear paneles solares de última generación.

La experta en hidrógeno verde de Corfo, Ana María Ruz, señala que “si la energía solar la entendemos como producción de energía eléctrica, sin duda que nos ha permitido posicionarnos como uno de los países más interesantes”, afirma.

Los seguidores de eje permiten que el panel se mueva con el sol.

Ruz -quien también participó en el Comité Solar de Innovación Energética de Corfo- explica que existen diferentes proyectos de transformación energética solar que han permitido que Chile se posicione en el desarrollo tecnológico, nuevos diseños, patentes, productos y materiales de construcción para módulos solares.

“Podemos hacer una contribución súper importante al desarrollo tecnológico mundial. Tanto como concentración solar de potencia, como sistema fotovoltaico, estoy segura que podemos hacerlo y contribuir al conocimiento global”, sostiene la experta.

Módulos para el desierto de Atacama

En 2017 surgió al alero de Corfo “Atacama Module and System Technology Consortium” (Atamostec), iniciativa público-privada de experimentación y desarrollo de tecnología fotovoltaica para condiciones de alta radiación y desierto.

Entre sus líneas de trabajo, destaca el proyecto de módulos bifaciales para el desierto de Atacama, que obtuvo el premio Sillicon PV, entre 164 proyectos internacionales.

Ruz explica que esta tecnología busca garantizar no solo la cantidad y la eficiencia de la energía que producen los módulos, sino también su durabilidad.

“El foco principal del proyecto es la reducción del costo nivelado de la energía, el cual en 2015 era de US$ 25 por MW/hora y hoy está bajo los US$ 15 por MW/hora con las nuevas tecnologías que están desarrollando’’, explica Ruz.

Inteligencia artificial

Alejo López, director comercial para América Latina de la empresa de tecnologías para la industria solar, Nextracker, destaca a Chile como uno de los mercados más importantes de la región en energía solar, de ahí que hayan decido instalarse en el país.

Comenta que una de sus tecnologías que ha penetrado a nivel local, son los seguidores de un eje para proyectos solares de gran escala, que están presentes en 50 proyectos de empresas como Enel y Atlas.

Explica que los seguidores se montan en las estructuras de los paneles solares para aumentar la producción y la radiación disponible y permiten que los paneles puedan seguir la dirección del sol eliminando el sombreado. Se trata de un sistema con inteligencia artificial que aprende las condiciones climáticas que se dan en ciertos momentos del día, a lo largo del año.

El próximo paso para la inteligencia del proyecto, adelanta López, es que esté conectado con un pronóstico y pueda adaptarse.

También hay emprendimientos locales que están incursionando en tecnologías para la industria solar. Un ejemplo es Sunai, que aplica algoritmos de aprendizaje automático para diagnosticar problemas en plantas fotovoltaicas.

Desarrollaron Neural, una plataforma web con distintos módulos y funcionalidades que permiten operar portafolios solares con distintas características, en las cuales se puede administrar, mantener y analizar plantas solares, según señala su sitio web.

Almacenamiento, el próximo desafío

Para López, el próximo desafío de la industria solar en Chile pasa por la integración de la generación de energía eléctrica a partir de fuentes solares con sistemas de almacenamiento, “para hacerla despachable y disponible cuando la energía se necesite”.

El ejecutivo explica que esta integración con “va a ser fundamental para que esta industria continúe creciendo y verdaderamente pueda reemplazar a otras tecnologías que son firmes, como las plantas termo eléctricas y el gas natural”, dice.

Por lo mismo, proyecta que en los próximos cinco años se verá una implementación masiva de baterías en el mercado chileno.