Un tercio de funcionarios públicos ha usado IA, pero admite inquietud por impacto en su empleo

La inteligencia artificial (IA) ha ido ganando espacio en el mundo laboral privado y público. Así lo evidenciaron los resultados de la Encuesta Nacional de Funcionarias/os Públicos 2023, realizada por el Servicio Civil, en conjunto con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y académicos de la University College London (UCL), la Universidad de Oxford y la U. de Roskilde.

La medición, realizada entre junio y agosto de 2023 y en la cual participaron 26.677 personas de 125 servicios públicos, una de cada tres ha usado plataformas de inteligencia artificial -como ChatGPT o Google Bard-, y un 39% manifestó preocupación de que el avance de la tecnología pueda dejar obsoletas sus competencias y experiencia laboral.

Además, de cada 10 personas aproximadamente siete están comprometidas con su organización, seis quisieran permanecer en su servicio a corto y largo plazo, y ocho están comprometidas con el servicio público y la ciudadanía.

Para el sondeo, los valores de compromiso organizacional, intención de permanencia laboral y compromiso con el servicio público y la ciudadanía son nuevamente cercanos a promedios internacionales. Por ejemplo, el 71% de los funcionarios expresó la disposición a hacer “grandes sacrificios por el bien de la sociedad” frente al 68% de una muestra de seis países de una medición mundial.

En materia de meritocracia, un 51% respondió que se enteró de la oferta laboral mediante un aviso público de difusión, índice que en 2019 era de solo 32%. Respecto a las evaluaciones de desempeño, 91% indicó haber sido sometido a estas en los últimos dos años y tres de cada cuatro ha sido retroalimentado por su jefatura, estableciendo objetivos y resultados esperables.

“Hoy vemos que la mayoría de los funcionarios públicos que ingresaron en el último tiempo al Estado se enteró de ese empleo por convocatorias abiertas, la mayoría percibe que los ascensos que se dan en sus servicios tienen un carácter meritocrático y ha aumentado la percepción de estabilidad laboral”, destacó el director nacional del Servicio Civil, Felipe Melo.

Con relación a la estabilidad laboral, un 33% de los encuestados afirmó que las transiciones de Gobierno le afectan, cifra muy por debajo del 49% registrado en 2019; mientras que un 48% admitió una carga laboral excesiva y seis de cada 10 ven que su superior jerárquico ejerce buenas prácticas de liderazgo.

A su vez, 69% de los consultados dijo haber capacitado sobre ética en el sector público, lo que marca un avance respecto al 52% de 2019.

Un 82% manifestó que trabajó igual o de manera más productiva en trabajo remoto versus presencial durante la pandemia, y casi la totalidad manifestó su deseo de seguir en esa modalidad.

El investigador del University College London, cofundador de la Encuesta Mundial de Funcionarios y Funcionarias Públicos, Christian Schuster, planteó que el sondeo “muestra que al mismo tiempo que mejoran aspectos como la percepción de la estabilidad laboral y la contratación meritocrática, también hay desafíos persistentes, como la competitividad salarial y la gestión de la diversidad”, destacó.

Modernización del Estado

Junto con la valorar la medición diseñada en 2016, la cual se aplicó por primera vez en 2019 y a la que decidieron darle continuidad con su aplicación en 2023, la subsecretaria de Hacienda, Heidi Berner, recordó que la administración Boric está implementando una Agenda Modernización del Estado compuesta por 24 iniciativas transversales y seis intersectoriales, que contempla avances en varias de las áreas abordadas por el estudio.

Un aspecto del que se hizo cargo el investigador de la Universidad de Oxford y codirector de la encuesta, Javier Fuenzalida: “Varias de las actitudes laborales y prácticas de gestión examinadas en la encuesta marcan una alta heterogeneidad entre los servicios que participan”.

Para el jefe de Operaciones BID Chile, Pablo Angelelli, este tipo de instrumentos -como la encuesta- son fundamentales para impulsar el trabajo colaborativo y apoyo para enfrentar temáticas como la baja participación femenina en cargos de alta dirección, aumentar la diversidad de postulantes en regiones y evitar sesgos en procesos de reclutamiento y selección.