Un grupo de investigadores italianos dijeron que habrían hallado fragmentos de huesos de la mujer inmortalizada por Leonardo da Vinci en su aclamado cuadro "La Mona Lisa".
Sin embargo, los límites de la tecnología actual hicieron imposible determinar con certeza si habían descubierto los restos de Lisa Gherardini, quien se cree fue la inspiración de Da Vinci y esposa del comerciante de seda florentino Francesco del Giocondo.
"La Mona Lisa", conocida también como "La Gioconda", se exhibe en el museo del Louvre de París y es posiblemente el cuadro más famoso del mundo, con una joven mujer de brazos cruzados en su regazo y una ligera y enigmática sonrisa.
Aunque la identidad de la mujer no se sabe con certeza, muchos historiadores creen que era Gherardini y arqueólogos comenzaron a buscar su cuerpo tres años atrás en un convento donde pasó sus últimos días de vida.
Además abrieron la tumba familiar de los Giocondo en una iglesia de Florencia para hacer una comparación de ADN.
Se descubrieron varios cuerpos, pero las pruebas de carbono hallaron que solo un grupo de fragmentos óseos databan de principios del Siglo XVI, época en que vivió Gherardini y cuando Da Vinci pintó el cuadro.
Silvano Vinceti, director del Comité Italiano para la Promoción del Patrimonio Histórico y Cultural, dijo que teniendo en cuenta la documentación sobre la sepultura y los análisis científicos confiaba en que habían desenterrado a Gherardini.
"Si me preguntaran qué pienso y siento, de manera subjetiva, les diría que creo que la hemos encontrado", afirmó a periodistas.
Otros expertos fueron más cautos y dijeron que, debido al mal estado de los fragmentos, era imposible estar seguros de quién era la persona.
Giorgio Gruppioni, profesor de antropología de la Universidad de Bolonia, dijo que basados puramente en evidencia científica, las posibilidades que de hubieran hallado a la Mona Lisa no eran altas.
Tras la sonrisa
Los investigadores abrieron la tumba en Florencia en busca de restos que pudieran confirmar la identidad de la mujer cuya enigmática sonrisa inmortalizó Da Vinci.
Un agujero circular, lo suficientemente grande para que pase una persona, se abrió en el suelo pétreo de la iglesia, sobre la cripta familiar del mercader Giocondo, en busca de su esposa que se cree que posó para Da Vinci.
Abundan las teorías sobre quién era la auténtica Mona Lisa, pero Vinceti, escritor e investigador, tenía previsto ya en ese entonces hacer las pruebas de ADN a los huesos en la húmeda cripta e intentar contrastarlos con los de las tres mujeres enterradas en un convento cercano.
Los historiadores dicen que Gherardini –cuyo nombre de casada, 'Gioconda', es usado en referencia a la Mona Lisa– pasó sus últimos años en el convento de Santa Úrsula, un edificio en ruinas donde comenzó la búsqueda de sus huesos el año pasado.
Durante siglos, historiadores de todo el mundo han aparecido con varias teorías sobre quién había sido esta mujer enigmática y misteriosa, dijo entonces Vincenti a las puertas de la basílica Santissima Annunziata de Florencia.
Vinceti espera que algunos de los huesos de la cripta que está detrás del altar principal de Santissima Annunziata pertenezcan a al menos un pariente de la musa de Leonardo, probablemente su hijo Piero.
Una vez que se consiga una coincidencia de ADN, Vinceti dice que puede generarse una imagen del rostro de Gherardini a partir del cráneo de Santa Úrsula y compararse con lapintura, que es el principal atractivo del museo del Louvre en París, que recibe a millones de visitantes cada año.
"Cuando encontremos una coincidencia, entonces habremos encontrado a la Mona Lisa", dijo.
La pintura, que atrae a millones de visitantes cada año en el enorme museo parisino, es famosa por su misteriosa sonrisa. El Louvre dice que probablemente se pintó entre 1503 y 1506.