El porcentaje de hombres que toma cuatro o cinco bebidas alcohólicas al mes en el continente americano se duplicó en los últimos cinco años, mientras que en mujeres se triplicó, según un informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
"El aumento en el consumo problemático de alcohol puede adjudicarse a su alta disponibilidad en los países de nuestra región y su bajo precio. Hay un mercadeo masivo y no regulado con mucha publicidad de estas bebidas", explicó hoy a la agencia EFE, Maristela Monteiro, asesora principal en abuso de sustancias y alcohol de la OPS.
La experta advirtió, además, que la edad de inicio es cada vez más temprana.
Según el informe de la OPS, el porcentaje de hombres que consume al menos cuatro o cinco bebidas alcohólicas al mes en la región subió del 17,9% al 29,4% entre 2005 y 2010. En tanto, esta medición en el caso de las mujeres aumentó desde una tasa de 4,6% a una de 13% durante el mismo período.
Los habitantes del continente americano consumen un promedio de 8,4 litros de alcohol puro por año, lo que es 2,5 litros menos que en Europa, pero 2,2 litros más que el promedio mundial.
Los países que más beben en la región son los siguientes:
Chile: lidera el ranking, con un consumo anual per cápita de 9,6 litros de alcohol puro.
Argentina: 9,3 litros per cápita.
Venezuela: 8,9 litros de alcohol per cápita.
Después de los tres primeros, se encuentran los siguientes:
Paraguay (8,8 litros), Brasil (8,7), Perú (8,1), Panamá (8), Uruguay (7,6), Ecuador (7,2), México (7,2), República Dominicana (6,9), Colombia (6,2), Bolivia (5,9), Costa Rica (5,4), Cuba (5,2), Nicaragua (5), Honduras (4), Guatemala (3,8) y El Salvador (3,2).
Consumo Nocivo
En tanto, uno de cada cinco bebedores (un 22%) de la región toma alcohol de forma excesiva, un porcentaje superior al promedio global (16 %), indicó la OPS.
El alcohol tiene tasas más altas de consumo nocivo en Paraguay, Saint Kitts y Nevis, Dominica, Venezuela y Trinidad y Tobago, según el informe.
El 5,7% de los habitantes de la región asegura padecer algún trastorno relacionado con el consumo de alcohol, aunque la OPS estima que el número de afectados puede ser mayor.
Entre las medidas propuestas por la OPS, destaca el aumento de los impuestos al alcohol, la imposición de una edad mínima para la compra y venta de esta bebida, así como impulsar restricciones en los horarios y locales de venta.