Macro

OCDE alerta de bajo crecimiento de Chile en próximos años y sugiere reforma tributaria para permitir más gasto social

El capítulo nacional plantea que el PIB local crecerá 12% este año, para moderarse a 3,5% en 2022 y 2% en 2023. La entidad afirma que “a corto plazo, el principal reto de las políticas macroeconómicas será evitar el sobrecalentamiento de la economía”.

Por: Montserrat Toledo | Publicado: Miércoles 1 de diciembre de 2021 a las 07:00 hrs.
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Un complejo panorama económico para Chile en los años que vienen es lo que anticipa la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Si bien este año el Producto Interno Bruto (PIB) crecería 12% este año, en 2022 se moderaría a 3,5% y a 2% en los doce meses siguientes, a medida que se endurezcan las políticas monetaria y fiscal.

En sus Perspectivas económicas dadas a conocer hoy, el organismo multilateral destaca que la economía nacional está "creciendo con fuerza", impulsada por el rápido avance del proceso de vacunación -que califica como uno de los más rápidos del mundo-, por los paquetes de estímulos fiscales y el impacto de corto plazo de los retiros desde las AFP en el consumo.

La nota sobre Chile pone el acento en que "hace falta una reforma que permita aumentar la recaudación de ingresos públicos para satisfacer las mayores necesidades de gasto social". Reforzar el acceso a una educación de calidad, a la formación permanente y a la asistencia en la búsqueda de empleo son algunas de los cambios estructurales que propone la entidad, para hacer frente a las inequidades, y también para fomentar la mayor recuperación del empleo.

Además, indica que las reformas planificadas para aumentar las pensiones de los trabajadores de bajos ingresos "promoverán la inclusión, pero será inevitable una reforma más profunda del sistema de pensiones para corregir prestaciones por jubilación estructuralmente bajas y los mayores costos de financiación, que se han visto agravados por los retiros de los fondos de pensiones".

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La inflación también está en el radar de la OCDE: el Índice de Precios al Consumidor (IPC) llegaría a 4,3% este año, para seguir subiendo a 5,4% en 2022, y volver gradualmente al objetivo de 3% a comienzos de 2023.

De hecho, la organización advierte que, a corto plazo, "el principal reto de las políticas macroeconómicas será evitar el sobrecalentamiento de la economía", detallando que "el ajuste fiscal previsto es adecuado".

Los economistas del foro estiman que la política monetaria se seguirá endureciendo hasta alcanzar la neutralidad a comienzos del próximo año.

En lo laboral, el informe alerta que el empleo se seguiría recuperando a un ritmo más lento que la economía, y que los niveles prepandemia se recuperarían recién a comienzos de 2023. Este año la tasa de desempleo quedaría en 8,9%, para bajar a 7,5% el año que viene y a 6,9% el siguiente. Además, la entidad recuerda que como las empresas están teniendo dificultades para contratar trabajadores, han surgido presiones salariales.

Panorama fiscal

La OCDE destaca que la política fiscal reaccionó "enérgicamente" en apoyo a los hogares y empresas este año: las iniciativas representaron -en conjunto- el 8% del PIB, e incluyeron transferencias monetarias que llegaron al 80% de los hogares. El reporte prevé que las medidas ya mencionadas "reduzcan significativamente la pobreza y la desigualdad en 2021".

La nota nacional también señala que la consolidación fiscal reducirá el déficit fiscal estructural del 11,5% del PIB de este año al 3,9% en 2022, y luego en un 1% del PIB al año desde 2023. Esto, dice el artículo, permitirá estabilizar el nivel de deuda pública cerca del 40% del Producto.

El reporte detalla que entre los riesgos a la baja de las proyecciones están una inflación más persistente y un sobrecalentamiento de la economía. Además, alerta que el resultado del proceso constituyente y las elecciones presidenciales son "factores de incertidumbre".

Precisa, además, que un cuarto retiro desde las AFP "reduciría aún más las pensiones, ya de por sí bajas, incrementaría las desigualdades y obligaría a los fondos de pensiones a liquidar activos, agravando los efectos negativos ya observados sobre la estabilidad financiera". Y, detalla que el impulso de la demanda doméstica de corto plazo acentuaría el sobrecalentamiento de la economía.

Los riesgos al alza son menos: incluyen una resolución más rápida de los cuellos de botella en las cadenas de suministro mundiales y una materialización adicional de la demanda acumulada.

 

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