La posibilidad de que Telefónica adquiera la participación de Grupo Televisa de la operadora de telefonía móvil Iusacell en México despeja del camino toda pérdida contable que la televisora haya registrado en su inversión de casi US$ 1.600 millones, realizada hace dos años en la empresa que mantiene en copropiedad con Grupo Salinas.
La venta daría además a Televisa la oportunidad de formalizar una alianza con Telefónica como “su socio natural” en cuanto la oferta de contenidos y de paso la empresa de San Ángel saldría airosa de una apuesta que a la fecha ha visto reducir el valor de su inversión en Iusacell en cerca de 30%.
Televisa puede vender a Telefónica su parte “de menos” al mismo precio que la compró y mantener “buenos términos” con la firma española como socia en el mercado de las telecomunicaciones. Televisa se encuentra “en la mejor posición” para desprenderse del 50% de Iusacell y “salir con dignidad”, por ahora, del negocio.
Y aunque Iusacell ha visto crecer su base de clientes desde que Televisa realizó su aportación de capital, la operadora de telefonía ha sufrido una notable desconexión de líneas debido a la portabilidad numérica.
La inyección a Iusacell no sólo ha sido de capital, sino también de exposición, dado que la operadora ha podido transmitir su imagen en los canales de la cadena, los más vistos del país, oportunidad con la que no cuentan las empresas de América Móvil, Telcel y Telmex, luego que éstas salieron de la pantalla de Televisa en 2011 debido a un aumento a las cuotas de publicidad. Iusacell será el más beneficiado de todos.
Televisa no puede menos que vender en lo mismo que compró. Iusacell tiene un valor distinto: cuando la compró tenía más de tres millones de clientes y ahora cuenta con nueve, lo cual da un valor relevante a su inversión, dijo Fernando Negrete, Director General de Mediatelecom Policy & Law. “Televisa tendrá una caja más sólida para concentrarse en su nicho de mercado: los contenidos”.