Netanyahu promete seguir luchando en Gaza, mientras Yihad Islámica se suma a reuniones en El Cairo
Los grupos militantes han afirmado que no discutirán la liberación de rehenes a menos que Israel ponga fin a su guerra en Gaza, mientras que los israelíes dicen estar dispuestos a discutir sólo una pausa temporal.
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El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se comprometió este domingo a adentrarse más en Gaza después de que sus tropas sufrieran una de las peores jornadas de pérdidas de su guerra terrestre, mientras la Yihad Islámica se sumó a las reuniones en El Cairo, señal de que la diplomacia sigue viva.
La llegada a El Cairo de una delegación encabezada por el líder en el exilio de la Yihad Islámica, Ziad al-Nakhlala, se produjo tras las conversaciones a las que asistió en los últimos días el jefe de Hamás, Ismail Haniyeh. La Yihad Islámica también tiene rehenes en Gaza.
Hasta ahora, los grupos militantes han afirmado que no discutirán la liberación de rehenes a menos que Israel ponga fin a su guerra en Gaza, mientras que los israelíes dicen estar dispuestos a discutir sólo una pausa temporal en los combates.
Sin embargo, ninguna de las partes ha abandonado de forma pública unas conversaciones que Washington calificó la semana pasada de "muy serias", pese a que los combates se han intensificado en toda la Franja de Gaza desde que se rompió una tregua a principios de diciembre.
Las conversaciones de El Cairo se centrarán en "las formas de poner fin a la agresión israelí contra nuestro pueblo", declaró un responsable de la Yihad Islámica. La delegación reafirmará la postura del grupo de que cualquier intercambio de rehenes tendrá que garantizar la liberación de todos los palestinos encarcelados en Israel, "después de que se logre un alto el fuego", dijo el funcionario.
Se cree que Hamás y la Yihad Islámica, que han jurado la destrucción de Israel, siguen reteniendo a más de 100 rehenes de los 240 que capturaron durante el asalto del 7 de octubre a ciudades israelíes, en el que mataron a 1.200 personas.
Desde entonces, Israel ha asediado la Franja de Gaza y ha arrasado gran parte de ella, con más de 20.400 muertos confirmados, según las autoridades de Gaza, y miles de personas más bajo los escombros. La gran mayoría de los 2,3 millones de habitantes de Gaza han sido expulsados de sus hogares y, según Naciones Unidas, las condiciones son catastróficas.
Tras el fracaso de una tregua de una semana a principios de mes, los combates sobre el terreno no han hecho más que intensificarse, y la guerra se ha extendido desde el norte de la Franja de Gaza a toda la extensión del enclave.
Día difícil
El ejército israelí dijo que perecieron 10 de sus soldados en el último día, tras los cinco muertos del día anterior, sus peores pérdidas en dos días desde principios de noviembre.
"Esta es una mañana difícil, después de un día muy difícil de combates en Gaza", dijo Netanyahu en una reunión del gabinete el domingo. "La guerra nos está exigiendo un costo muy elevado; sin embargo, no tenemos otra opción (que) seguir luchando".
En un mensaje de video posterior dijo que las tropas seguirán luchando en Gaza hasta la "victoria total" sobre Hamás, y añadió: "Estamos haciendo todo lo posible para salvaguardar la vida de nuestros guerreros".
Israel se ha visto sometido en las últimas semanas a una presión cada vez mayor por parte de su aliado más cercano, Estados Unidos, para que reduzca su campaña militar y disminuya el número de muertes de civiles.
El viernes, Washington retiró por primera vez su veto a una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la guerra, permitiendo que se aprobara tras suavizar el texto que pedía el cese inmediato de las hostilidades.
El sábado, el jefe del Estado Mayor israelí declaró que sus fuerzas habían logrado en gran medida el control operativo en el norte de Gaza y que ampliarían sus operaciones en el sur.
Sin embargo, los residentes afirman que los combates se han intensificado últimamente en los distritos del norte, sobre todo en Jabalia, que las fuerzas israelíes bombardearon con ataques aéreos durante la noche y el domingo. El sábado, los tanques se adentraron en la ciudad.
En la parte central de la Franja de Gaza, los médicos dijeron que seis palestinos murieron en un ataque aéreo israelí contra una casa en el campo de refugiados de Bureij, donde el ejército israelí ordenó a la población que evacuara y se dirigiera al oeste, hacia la ciudad de Deir Al-Balah.
Joudat Imad, de 55 años, padre de seis hijos, tuvo que abandonar una zona del campo de refugiados de Nusseirat, en el centro de Gaza, después de que un mapa publicado por el ejército lo marcara como un lugar que la gente debía evacuar.
"Tuve suerte de conseguir una tienda de campaña en Rafah", dijo a Reuters por teléfono. "De ser propietario de dos edificios a refugiado en una tienda de campaña esperando ayuda, en eso nos ha convertido esta guerra brutal. El mundo está enfermo e inhumano porque no puede ver la brutalidad de Israel y no puede detener esta guerra de destrucción y hambre".
En Rafah, en la frontera sur de Gaza con Egipto, un ataque aéreo israelí contra una casa mató a dos personas, según informaron médicos palestinos.
La Media Luna Roja Palestina informó de un ataque contra una de sus principales bases en Jan Yunis, en el sur de la franja. Dijo que un niño de 13 años había muerto por los disparos de un avión no tripulado israelí cuando se encontraba en el interior del hospital Al-Amal.
El ejército israelí ha lamentado la muerte de civiles, pero culpa a Hamás de operar en zonas densamente pobladas o de utilizar a civiles como escudos humanos, acusación que el grupo niega.
El conflicto se ha extendido a medida que las fuerzas hutíes de Yemen, alineadas con Irán, complican el comercio mundial con ataques con misiles y drones contra buques en el mar Rojo en represalia por el ataque de Israel a Gaza.
Estados Unidos derribó el sábado cuatro drones lanzados desde áreas controladas por los hutíes en Yemen hacia un destructor estadounidense en el sur del mar Rojo, elevando a 15 el número de ataques de este tipo contra transporte marítimo comercial, según el Comando Central de Estados Unidos.