Obama tendrá poco tiempo para celebrar, con una economía que sigue muy resentida

Por Constanza Morales H.




A casi dos meses de comenzar su segundo período como presidente de Estados Unidos, Barack Obama no tendrá mucho tiempo para disfrutar la reelección, ya que rápidamente tendrá que elegir al nuevo equipo que lo acompañará hasta 2016.

Una de las bajas más notables será el actual secretario del Tesoro, Timothy Geithner, quien ya anunció que no seguirá en el cargo.

Ben Bernanke, otro de los hombres fuertes de la actual administración, también podría dejar su cargo como presidente de la Reserva Federal. Su mandato vence en enero de 2014 y Bernanke ha comentado en privado que no desea postular a un tercer período, lo que obliga a Obama a buscar a un nuevo líder que mantenga la actual política de la Fed.




Compromisos electorales


Una vez definido el nuevo equipo, Obama tendrá que enfocarse en cumplir las promesas realizadas durante la campaña presidencial.

Uno de los temas más urgentes es la política fiscal. Antes de iniciar su segundo mandato el próximo 20 de enero, el presidente tendrá que resolver el denominado abismo fiscal, una mezcla de recortes en gastos y alzas en impuestos que se activarán automáticamente el 1 de enero si no hay un acuerdo en el congreso y que podría empujar al país de regreso a la recesión.

Además, Obama deberá encargarse de la deuda, que ya supera los 
US$ 16 billones (millones de millones), y del déficit. El mandatario se ha comprometido a reducirlo en 
US$ 4 billones en diez años. La amenaza es tan seria que la agencia Fitch advirtió ayer que rebajará la nota AAA del país si no se llega a un pacto fiscal. 
 El otro gran tema que deberá abordar Obama es el laboral. Los puestos manufactureros han estado cayendo por casi dos décadas. El demócrata prometió crear un millón de estos empleos de aquí a 2016. 
El aumento de los impuestos de los más ricos y la regulación al sistema financiero son otros de los puntos en los que Obama se enfocará en los próximos cuatro años.

El presidente ha estado empeñado en lograr la independencia energética. Hacia 2020 pretende reducir las importaciones de petróleo a la mitad a través de una “estrategia amplia”, que incluye aumentar la producción local de crudo y gas y desarrollar otras fuentes de energías. En esta línea, Obama ha declarado que eliminará los subsidios a la industria petrolera.

En el ámbito social, la agenda estará marcada por la reforma de salud aprobada en 2010. En 2014, todos los ciudadanos estarán obligados a contratar un seguro médico. Asimismo, Obama buscará elevar la edad de jubilación gradualmente y aumentar las cotizaciones. 
Y una de las últimas promesas de campaña fue la creación del puesto de secretario de Negocios.