Seis desafíos para el nuevo reinado de Felipe VI
Tareas del nuevo rey van desde conflictos internos hasta la imagen en el exterior.
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El nuevo monarca jugará un papel decisivo de intermediación, tanto entre las fuerzas políticas, como entre territorios españoles. La crisis parece disiparse, pero aún se necesita el optimismo de Juan Carlos I y su apoyo a los empresarios en el exterior. Estos son los ejes que marcarán el reinado de Felipe.
Gobernabilidad
El bipartidismo está en riesgo y con ello la gobernabilidad, sostienen algunos. Felipe VI deberá afrontar a partir de 2016 un Congreso de los Diputados donde Podemos, IU o ERC, resueltamente antimonárquicos, proyectan mucho poder. El monarca deberá levantar puentes y limar diferencias para asegurar la gobernabilidad.
Aplacar el secesionismo
Las elecciones municipales y autonómicas darán poder inédito a los partidos secesionistas. Tanto el Parlamento vasco como el catalán han proclamado el derecho a la autodeterminación. La sucesión se ha interpretado como una vía para aplacar el soberanismo: Felipe ha intensificado su presencia en Cataluña en los últimos meses, y se le ve como auténtico mediador en este conflicto.
"Las reformas"
Juan Carlos delegó ayer en su sucesor para "emprender con determinación las transformaciones y reformas". Son muchas las voces que piden a los partidos una reforma de la Constitución para mejorar el encaje autonómico, pero también para que las nuevas generaciones se sientan cómodas con la norma fundamental.
Limpieza institucional
El futuro rey puede convertir su coronación en una remodelación de la Casa Real, cada vez peor valorada por la falta de transparencia y corrupción. Una monarquía más abierta y cercana es el principio de una renovación de las instituciones, desde el poder legislativo hasta el judicial.
Crisis económica
La crisis empieza a despejarse, pero no lo suficiente para que no prevalezcan, en palabras de Juan Carlos I, "las serias cicatrices en el tejido social". La monarquía deberá seguir trabajando para que no se agrande la brecha social. Felipe VI tiene el reto de impulsar grandes pactos de Estado en materia económica, así como calmar a una ciudadanía agotada por la recesión.
Imagen exterior
Está por verse si Felipe VI tendrá la misma mano que su padre en abrir camino a las empresas españolas en el exterior, y desencallar inversiones en España con su intervención. No tan relacionado con los jeques como su padre, ha granjeado importantes amistades en América Latina, y sin olvidar Europa.