Colombia definirá a su próximo presidente en un balotaje en junio, después de que el candidato derechista Oscar Iván Zuluaga y el mandatario Juan Manuel Santos no lograran ayer los votos necesarios para consagrarse en una primera vuelta.
Con casi el total de las mesas escrutadas, Zuluaga obtenía un 29,27% de los sufragios mientras Santos lograba un 25,63%, según los cómputos de la Registraduría Nacional para una elección donde el tema de fondo era elegir con qué fórmula poner fin a un largo conflicto con la guerrilla.
Los dos aspirantes son antiguos compañeros de gabinete, pero tienen profundas diferencias sobre cómo acabar con el conflicto interno de 50 años que ha dejado más de 200.000 muertos y ha limitado la expansión de la cuarta economía de América Latina.
Santos, quien hace 18 meses abrió una negociación con las izquierdistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ha hecho de la paz su principal bandera de campaña y busca su reelección con la ilusión de firmar un acuerdo que ponga fin a un conflicto.
Pero el derechista Zuluaga, delfín político del ex presidente Alvaro Uribe, ha capitalizado las dudas de muchos ciudadanos sobre la voluntad de paz de la guerrilla. Y amenaza con acabar la negociación porque, según él, los rebeldes no deben tener concesiones como la de llegar a ser congresistas.
Como ninguno de los dos candidatos obtuvo más del 50% de los votos, ahora tendrán que definir la presidencia en una segunda vuelta el 15 de junio. “¡Gracias Colombia! Tenemos una nueva oportunidad, demostraremos que si podemos tener una Colombia distinta”, escribió Zuluaga en su cuenta en Twitter.
Zuluaga, un ex ministro de Hacienda de 55 años, logró un vertiginoso ascenso en las encuestas al final de la campaña, pese a un escándalo que lo salpicó por sus presuntos nexos con un detenido hacker acusado de sabotear la negociación de paz entre el gobierno y las FARC.
“Nos importa la seguridad, entonces estamos cien por ciento por Zuluaga”, dijo José Gómez, un votante de 39 años.
A pesar de estar sentados a la mesa en La Habana para las negociaciones de paz, el gobierno ha lanzado ofensivas militares contra las FARC en las selvas y las montañas y el grupo rebelde ha respondido con ataques a la infraestructura petrolera.
Aunque Santos poco antes de los comicios logró un acuerdo con la guerrilla sobre la espinosa cuestión del narcotráfico, y además las FARC junto al más pequeño Ejército de Liberación Nacional (ELN) declararon un cese al fuego por las elecciones, esos logros no parecieron ayudarlo mucho el domingo.
Ahora tendrá que recuperar adeptos para el 15 de junio si quiere retener el poder.
Las propuestas económicas de Zuluaga poco difieren de las de Santos y ambos son partidarios del libre mercado, así como de políticas para combatir la pobreza, reducir el desempleo, mejor la salud y la educación pública.
Alianzas clave
Las alianzas serán decisivas para asegurar el triunfo en una segunda vuelta.
En el tercer lugar de la votación se ubicó la candidata del Partido Conservador, Marta Lucía Ramírez, con el 15,55% de los votos, seguida por la izquierdista Clara López del Polo Democrático con 15,24% y el aspirante de la Alianza Verde, Enrique Peñalosa con un 8,30%.
López y Peñalosa anunciaron que convocarán a reuniones a las directivas de sus partidos para evaluar las propuestas de Zuluaga y de Santos.
Aunque los comicios transcurrieron en calma, fue notoria la abstención de más de un 60%, por encima de anteriores elecciones. Como el voto no es obligatorio, históricamente sólo la mitad de los electores habilitados acuden a las urnas. (Reuters)