La mano de Ostalé tras el cierre de FPay, la división de pagos digitales de Falabella

Al interior de Falabella no hubo sorpresa tras el anuncio de cierre de Fpay, la división de prepago y pagos digitales del conglomerado: se estaba convirtiendo más en un lastre que un aporte.

El directorio del grupo Falabella, presidido por Enrique Ostalé, está buscando todos los flancos que están impactando en los resultados del grupo, y así se llegó a Fpay.

“La decisión de terminar con este negocio es parte del proceso de ajuste del portafolio de iniciativas que está pidiendo el nuevo presidente de la empresa”, explica bajo reserva una alta fuente del conglomerado.

¿La justificación? “Es un negocio donde hay mucha competencia y las nuevas regulaciones lo hacen inviable”, dice la misma fuente.

Quienes han trabajado con Ostalé destacan que tiene “buen ojo” para detectar dónde están las fugas, es decir, los problemas que impactan en los resultados de la compañía. Y no tendría problemas en cerrar las áreas que no aportan.

Con Fpay, el principal cambio será enfocar el negocio de esta división en el procesamiento de pago de los e-commerce del grupo y fortalecer la propuesta de pagos a los que venden sus productos a través de Falabella.com

También se integrarán las funcionalidades de la billetera digital de Fpay dentro de la aplicación de Banco Falabella, abordando desde ese espacio el negocio de pagos y servicios financieros a las personas.

Tras la decisión, Falabella llevará a cabo un proceso de migración de la billetera digital hacia la app de su banco.

La firma indicó que de manera paulatina se irán descontinuando las funcionalidades de la aplicación Fpay, así como la aceptación de pagos en comercios en Chile y Perú.

Estos cambios son parte de la agenda que está implementando el grupo Falabella para mejorar sus indicadores financieros.

A marzo, la deuda financiera total del conglomerado -sin las operaciones bancarias- superaba los US$ 5 mil millones.

La compañía también tiene en marcha un plan para vender activos inmobiliarios que están sin uso. Y estaría escuchando ofertas por algunos locales que se habían definido como prescindibles.