Walt Disney nombra a Mike Parker como nuevo presidente mientras se prepara batalla en directorio

El inversionista activista Nelson Peltz intentará forzar su ingreso al directorio de Walt Disney después de que la compañía se negara a nominarlo como director, preparando el escenario para una de las mayores luchas de poder en Estados Unidos en años.

Peltz planea llevar su intento por un puesto en la junta directiva directamente a los inversionistas, según personas informadas sobre sus planes, lo que lo confrontaría con Bob Iger solo unos meses después de que regresara para un segundo período como director ejecutivo del grupo de entretenimiento en expansión.

Disney dijo el miércoles que se oponía a otorgar un puesto en el directorio a Peltz, el director de Trian Partners, con sede en Nueva York, que posee una participación de US$ 900 millones en la empresa. En un aparente intento de adelantarse a la pelea que se avecinaba, Disney nombró al veterano de Nike Mark Parker como su próximo presidente.

Parker sucederá a Susan Arnold, cuyo liderazgo fue cuestionado el año pasado por el manejo de la compañía de los últimos meses en el cargo del exdirector ejecutivo Bob Chapek.

La lucha de poder de Peltz contra Disney sería una de las batallas más grandes de la sala de juntas desde que se abrió paso a la fuerza para ocupar el puesto de director en el grupo de productos de consumo Procter & Gamble en 2018.

La lucha de poder de meses de duración, en la que ambas partes gastaron más de US$ 100 millones para atraer a los accionistas, cautivó a Wall Street y Peltz finalmente salió victorioso por un margen de 0,002% antes de renunciar en 2021.

Trian publicó un informe de 35 páginas poco después del anuncio de Disney en el que criticaba su estrategia de fusiones y adquisiciones, en particular la adquisición de 21st Century Fox en 2018, y decía que mostraba “falta de criterio”.

El fondo activista también denunció las ineficiencias de costos en el negocio de transmisión de Disney, que según dijo había resultado en US$ 11 mil millones en pérdidas para la compañía hasta la fecha, y calificó su proceso de planificación de sucesión como "roto".

En el informe, titulado "Restaurar la magia", Trian expuso su visión para Disney, incluidos los llamamientos para asegurar un sucesor para Iger dentro de dos años y el restablecimiento de su dividendo para 2025.

Una persona cercana a Disney criticó el plan Peltz por carecer de estrategia. “Es realmente sorprendente que haya críticas en (la presentación de Trian) pero literalmente no una solución”, dijo la persona. “Peltz no tiene ningún plan”.

Momento desafiante

Disney dijo que Arnold, la primera mujer en presidir el grupo de entretenimiento, no se presentará a la reelección como directora en la próxima reunión anual de la compañía debido al límite de mandato de 15 años exigido por las reglas de permanencia de la junta.

Su período como presidente, que comenzó en 2021 después de que Iger renunció al cargo, estuvo marcado por los desafíos que trajo la pandemia de Covid-19, que afectó los negocios de parques temáticos y teatros de Disney.

Ella estuvo bajo escrutinio después de que la compañía renovó el contrato de Chapek el verano pasado luego de una dura confrontación con el gobernador de Florida por un proyecto de ley de educación considerado anti-LGBT por sus oponentes, solo para despedirlo en noviembre.

Parker, presidente ejecutivo de Nike, ha sido miembro de la junta directiva de Disney durante siete años. En un comunicado, Arnold dijo que Parker “ha ayudado a (Disney) a navegar efectivamente a través de un momento de cambio sin precedentes”.

Iger firmó un contrato de dos años con Disney cuando regresó en noviembre. En un comunicado, Parker dijo que su principal prioridad sería "identificar y preparar un sucesor exitoso del CEO" y que el proceso "ya ha comenzado".

El precio de las acciones de Disney cayó casi un 40% durante el año pasado, ya que los inversionistas comenzaron a cuestionar el alto gasto del grupo de entretenimiento en su negocio de transmisión.

El mal desempeño de las acciones atrajo la atención del inversionista activista Daniel Loeb, quien presionó con éxito a Disney para que nombrara a la veterana de los medios Carolyn Everson en su directorio el otoño pasado.