Starbucks anunció ayer que añadirá cerveza, vino y refrigerios a miles de tiendas de su cadena de cafeterías en Estados Unidos, y ampliará la oferta de almuerzos y tomará ordenes hechas por teléfono móvil.
Las adiciones son parte de un plan para ampliar su atractivo como destino para los consumidores que están gastando más en compras vía Internet en vez de hacerlo en centros comerciales y en las propias cafeterías.
La compañía explicó durante la reunión bianual de inversionistas celebrada en Seattle, que su plan a cinco años duplicaría los ingresos en EEUU por encima de los US$ 4.000 millones al expandir la oferta de alimentos, en particular durante la hora del almuerzo.
Starbucks planea captar aproximadamente US$ 1.000 millones en nuevas ventas de los productos añadidos al menú nocturno, incluidos cerveza, vino y alimentos, en casi 3.000 de sus 11.900 cafeterías en EEUU.
La compañía también detallará el lanzamiento de un nuevo sistema de órdenes por celular y pago que dice facilitará al consumidor conseguir su café. Esa misma tecnología será el respaldo para las entregas en selectos mercados estadounidenses el año próximo.
La unidad estadounidense de Starbucks tuvo un aumento de 1% en el tráfico de clientes en el último trimestre, frente a un alza de 5% en el mismo período del año previo. Un aumento en la venta de comida, como croissants y sandwiches para el desayuno, ha ayudado a compensar una reducción en el movimiento del público en los últimos tres trimestres.
El presidente ejecutivo de Stabucks, Howard Schultz, advirtió en enero que un cambio "sísmico" en las compras online estaba afectando el volumen del público en la temporada de fiestas para muchos comercios en Estados Unidos. Eso, dijeron los ejecutivos, contribuyó a una moderada desaceleración en el movimiento en diciembre de 2013.
Starbucks afirmó que también anunciará planes de crecimiento con los que busca duplicar su presencia en China a 3.000 cafeterías para el año 2019.