Multinacionales

Exxon trasladará sede a Houston y fusionará dos divisiones

La multinacional ha realizado una agresiva campaña de reducción de costos en los últimos años y está en camino de obtener US$ 6 mil millones en ahorros para 2023.

Por: Bloomberg | Publicado: Lunes 31 de enero de 2022 a las 16:53 hrs.
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La estadounidense Exxon Mobil trasladará su sede corporativa de Dallas al área de Houston y combinará sus divisiones de productos químicos y de refinación en una importante reestructuración destinada a reducir costos.

El gigante energético se organizará en torno a tres líneas de negocio principales: upstream, que produce petróleo y gas; soluciones de productos, que fabrica combustibles y productos químicos; y su división de bajas emisiones de carbono, informó hoy lunes la compañía en un comunicado.

Los cambios se llevarán a cabo a partir del 1 de abril y el traslado de la sede se completará a mediados de 2023.

"Una colaboración más estrecha y el nuevo modelo comercial simplificado permitirán a la compañía aumentar el valor para los accionistas y posicionar a Exxon Mobil para el éxito a través de la transición energética", dijo el director ejecutivo Darren Woods en el comunicado.

La nueva sede de Exxon estará ubicada en el mayor campus de oficinas de la empresa en EEUU, en Spring, al norte de Houston, que se inauguró bajo el mandato del exdirector ejecutivo Rex Tillerson en 2014.

Los ejecutivos de la compañía han trabajado en el famoso "God Pod", un gran parque de oficinas arbolado en Irving, al oeste de Dallas, durante tres décadas después de trasladarse desde un rascacielos en Manhattan.

Años complejos

Exxon ha realizado una agresiva campaña de reducción de costos en los últimos años y está en camino de obtener US$ 6 mil millones en ahorros para 2023, en comparación con los niveles de 2019, o lo suficiente para pagar alrededor del 40% de su dividendo.

Aunque Exxon es una de las empresas con mejores resultados del S&P 500 en 2022, sus últimos años han sido difíciles. La pandemia obligó a Woods a alejarse de su estrategia de crecimiento de US$ 200 mil millones en siete años hacia un modelo de bajo gasto y más eficiente en capital, luego de que la deuda se disparara en 2020.

Al año siguiente, el inversionista activista Engine No. 1 obtuvo el apoyo de los accionistas para reemplazar una cuarta parte del directorio de la empresa tras criticar sus resultados financieros y su enfoque del cambio climático.

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