China sacude confianza de empresas extranjeras tras nuevas detenciones de ejecutivos e investigación a contratista de Apple
Foxconn, principal productor externo del iPhone, sufrió este lunes su mayor caída en la bolsa en más de tres meses. Los medios de comunicación chinos informaron que se están realizando auditorías fiscales y revisando el uso del suelo por parte de la empresa taiwanesa.
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Las autoridades chinas volvieron a sacudir la confianza de las empresas extranjeras en el país con una serie de detenciones en distintos sectores y una investigación a Foxconn Technology, el socio más importante de Apple y uno de los mayores empleadores de China.
Durante el fin de semana, los medios de comunicación estatales afirmaron que los reguladores están llevando a cabo auditorías fiscales y revisando el uso del suelo por parte de Foxconn, la empresa taiwanesa que fabrica la gran mayoría de los iPhones en plantas de China. Hon Hai Precision Industry, filial de Foxconn, dijo que colaborará con las autoridades.
Detenciones en China
Mientras tanto, un ejecutivo y dos ex empleados de WPP, una de las mayores empresas de publicidad del mundo, han sido detenidos en China. WPP dijo el lunes que había despedido al ejecutivo acusado de soborno, y que había abierto una investigación interna sobre el incidente y cortado lazos con una parte empresarial no identificada que también está siendo investigada por la policía.
En marzo, el gobierno también detuvo a un empleado local de una empresa japonesa de comercio de metales, según informó el domingo el diario Nikkei. Y este mes, un tribunal acusó formalmente a un ejecutivo de Astellas Pharma como sospechoso de espionaje.
Hon Hai, la principal filial cotizada en bolsa de Foxconn, sufrió el lunes su mayor caída en más de tres meses. Foxconn Industrial Internet, una importante filial que cotiza en Shanghái, se desplomó hasta su límite diario de 10%, su mayor pérdida registrada. Luxshare Precision Industry, rival de Foxconn con sede en China, ganó hasta 4,9%.
China no suele explicar públicamente las medidas adoptadas por sus organismos reguladores, lo que deja a las empresas que operan en el país sin saber cuáles son los objetivos últimos del gobierno. Dado el inmenso poder del Partido Comunista, este enfoque poco transparente de la supervisión de la economía ha inquietado a los ejecutivos extranjeros. El trabajador de la empresa comercial japonesa fue detenido en marzo y aún no se han reconocido públicamente ni se han aclarado los cargos concretos.