La nueva Alitalia negocia con Air France y Lufthansa

El presidente de la Compañía Aérea Italiana (CAI), que dará lugar a la nueva Alitalia, Roberto Colaninno, ha asegurado que considera “indispensable” la presencia de un socio extranjero en el grupo, por lo que ya negocia con Air France-Klm y Lufthansa.

En una entrevista concedida al diario italiano ‘La Reppublica’, Colaninno no ha querido decantarse por ninguna de las dos compañías, pero ha asegurado que "estamos tratando con los dos y van a la misma velocidad. Uno de los dos nos es necesario, es indispensable".

La aerolínea franco-holandesa Air France-Klm ya se ha pronunciado públicamente al respecto, y ha afirmado que está dispuesta a entrar en la nueva sociedad con una participación mayoritaria, “si se confirman las perspectivas de rentabilidad”.

En cuanto a esto, el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha afirmado que cualquier alianza con una compañía extranjera supondría que ésta tendría una “participación minoritaria”.

Por otra parte, se espera que el consejo de administración de Alitalia, que se reúne hoy para aprobar los resultados semestrales, pida el paso de la compañía, que desde hace dos años se encuentra en proceso de privatización y al borde de la quiebra, a la situación de administración especial.

Plan "Fénix"

Sería el punto de partida para la aplicación del plan “Fénix”, diseñado por el banco Intesa-SanPaolo para relanzar la aerolínea. Dicho plan contempla la división de la aerolínea en dos partes. La primera de ellas estaría libre de deudas y reunirí las actividades rentables de la compañía, que serían compradas por la CAI, creada esta semana por un grupo de 16 empresarios italianos. La CAI está llamada a crear una nueva compañía de bandera mediante la unión de los activos y rutas útiles de Alitalia y de la aerolínea AirOne, la segunda del país.

Las segunda mitad de Alitalia, que previsiblemente pasará bajo administración especial, se haría cargo de las deudas y el resto de actividades.

El Gobierno italiano, por su parte, procedió ayer a modificar la ley que regula la quiebra y crisis de las grandes empresas para allanar el camino hacia la creación de una nueva Alitalia y permitir la aplicación del "plan Fénix".