A un año de su arribo como titular de la Coordinación de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas, Eduardo Abedrapo analiza este período donde han concretado varios hitos, entre ellos cumplir la meta de inversiones por US$ 1.500 millones que planteó el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, a través de proyectos nuevos y compromisos para el mejoramiento de concesiones viales en operación, mediante un análisis metodológico desarrollado en conjunto con la Dipres.
Otros factores que destaca son el avance del proyecto que transforma esta unidad en una dirección, el que espera esté aprobado hacia fin de año, y el diseño de una cartera de proyectos a cinco años que rompa el ciclo político y se constituya como una alternativa coherente, que va más allá de las ideas de proyectos.
“Cuando llegamos depuramos qué era factiblemente concesionable y qué no. La gente presenta muchas ideas que no son concesionables y que muchas veces no están ni desarrolladas”, explicó.
Frente a las críticas de quienes apuntan a que el período de los grandes proyectos concluyó, el coordinador de Concesiones llamó a “derribar el fetiche” de la concesión y entender este sistema como uno donde todos los tipos de proyectos tengan cabida.
“Tenemos en carpeta grandes obras de inversión e intervención, pero las concesiones no pueden quedarse sólo en los grandes proyectos. Este sistema también puede servir para otro tipo de proyectos con menor impacto, que son importantes, que generan aprecio ciudadano y garanticen un flujo constante”, aseguró.
En este sentido, precisó que su interés es tener seis o siete licitaciones por año y no un sistema, dijo, donde tras una gran licitación podían pasar dos años sin concursos.
“Este nuevo sistema va consolidando una cartera equilibrada con inversiones entre US$ 1.300 millones y US$ 1.500 millones. Le aseguro que este año y el próximo tendremos cinco a siete proyectos adjudicados, lo que es muy importante también para la industria”, comentó.
Abedrapo añadió que la expectativa del gobierno es que al fin de su período se hayan adjudicado del orden de 12 a 13 proyectos, con una inversión total del orden de los US$ 6.000 millones.
Segunda fase de AVO
En esta carpeta de proyectos la segunda fase de Vespucio Oriente (AVO) se alza como la más próxima licitación.
Abedrapo adelantó que las bases del concurso ya están en revisión por parte de la Contraloría, proceso que esperan concluya durante este mes, con lo cual -tal como anunció hace unos días el ministro Undurraga-, llamarían a licitación en julio para adjudicar el tramo Príncipe de Gales-Los Presidentes y que representa una inversión de US$ 800 millones, con US$ 120 millones de subsidio.
El proceso de precalificación, donde están participando prácticamente todas las empresas que actualmente tienen operaciones, según Abedrapo, podría deparar una sorpresa pues de culminar con éxito el trámite, se podría tener a la primera empresa china habilitada para presentar ofertas.
Se trata de China Harbour Engineering Company (CHEC), que “es una de las constructoras más grandes del mundo, es la segunda mayor de China, aunque pertenece al mismo consorcio estatal de la que lidera en ese país y compiten entre ellas”, comentó.
Abedrapo se refirió al “tremendo esfuerzo” que ha hecho la asiática para entender el mecanismo local.
En los próximos días también serán sometidas a toma de razón en la Contraloría las bases de la licitación de la Ruta de Nahuelbuta, que une dos regiones desde Los Ángeles hasta Angol.
Abedrapo también confirmó para este año el concurso de la Ruta de la Fruta, en la Región de O’Higgins, que en una nueva estimación representará una inversión de
US$ 600 millones y recibirá un subsidio de nada menos que el 60%. A esto se suma el teleférico Bicentenario, proceso que por sus características atípicas requirió la contratación de una empresa especialista internacional que está apoyando el diseño de las bases.
La intención de Abedrapo es que este año la coordinación deje llamados otros dos proyectos: la relicitación de la ruta de El Loa que fue abandonada por el concesionario porque no logró obtener el financiamiento, y la licitación del tramos de la ruta Los Vilos – La Serena, entre Coquimbo y La Serena.
Respecto de esta última ruta, el titular de la entidad adelantó que tendrá estándares de autopista metropolitana, razón por la cual representará el primer caso de “exportación” de las autopistas urbanas fuera de Santiago.
En los próximos años la seguiría la ruta que unirá Puerto Montt y Puerto Varas, tramo que responde a la misma situación que el anterior en que dos ciudades terminaron prácticamente unidas.
Costanera Central
Para 2017, el plan de la Coordinación de Concesiones considera la licitación de la Costanera Central, iniciativa privada que presentó OHL y que por el momento, determinó la entidad, se desarrollará sólo en el tramo entre Las Vizcachas y Vespucio, es decir, avenida La Florida donde se construirá un túnel minero que considere un corredor de transporte y la posibilidad a futuro de habilitar túneles de metro.
“Nuestros estudios técnicos, económicos y también territoriales nos indican que por ahora no es factible hacer el tramo que va de Américo Vespucio a la Ruta 78. Este proyecto fue propuesto por OHL desde Las Vizcachas hasta la Autopista de Sol, es un proyecto grande y ambicioso, pero avanzaremos con una parte que tendrá un costo en torno a US$ 1.000 millones”, explicó Abedrapo.
Añadió que están revisando la tramitación de los proyectos de iniciativa privada para acelerar el procedimiento, lo que dará certeza a los proponentes y también al Estado de que quienes presenten iniciativas serán capaces de desarrollarlas, pues advirtieron que este sistema se prestaba como un mercado secundario de venta de proyectos.
Negocian para traspasar el pago del IVA a las concesionarias de autopistas
El presupuesto de la Coordinación de Concesiones es el segundo más grande de toda la administración, pero actualmente la mitad de esos recursos se va al pago del IVA de las autopistas.
La situación se ha tornado compleja, explica Abedrapo, porque los nuevos proyectos que están en carpeta, sumado al incremento en el tráfico de las rutas en operación, amenazan con consumir totalmente el presupuesto que debería ser destinado a la inversión.
El Estado se hizo cargo de este pago, en la fase de construcción y de operación (en esta etapa el impuesto se calcula a partir de los ingresos mensuales), como una forma de facilitar el acceso a financiamiento por parte de los proyectos.
"Nosotros tenemos límite de gasto y la mitad de nuestro presupuesto es pago de IVA, entonces si quiero meter nuevas inversiones que tengan subsidios por parte del Estado va a llegar un momento en que estaremos impedidos de hacerlo.
Se podría decir que es plata del Estado, que son recursos que entrega el fisco y después se los devuelves, pero no, porque la Coordinación tiene un marco presupuestario que se va a agotar", explicó Abredrapo. Añadió que "este tema se está tornando complejo y derechamente puede distorsionar la posibilidad de incorporar nuevos proyectos, a pesar de que sean 100% sustentables".
Para revertir este escenario la autoridad está evaluando distintas opciones que impliquen traspasar ese pago a los concesionarios.
Así al menos lo hicieron en las negociaciones para el mejoramiento de dos rutas: el Eje Norte-Sur, específicamente en el Nudo Quilicura, y en la Ruta 68.
La moneda de cambio en ese caso será el tiempo, es decir, prolongar los períodos de la concesión, lo que -dado las favorables proyecciones de desempeño de las rutas- no significó un plazo muy extenso, ya que en el primer caso se trata de 30 meses y en el segundo de 20 meses adicionales. Abedrapo adelantó que analizan extender este traspaso a las nuevas concesiones.
FONDO EXTERNALIZARÁ ESTUDIO DE PROYECTOS
"Con el fondo de infraestructura no hay apuro, hay sectores que quieren que salga lo más rápido posible, pero las buenas comidas toman su tiempo. Lo importantes es que tiene que salir bien y dejar tranquilo a todo el mundo. El fondo es muy técnico, por lo que tenemos que asegurar todos los factores para que sea un instrumento eficiente para el Estado".
De esta forma, el coordinador de Concesiones se refiere a la iniciativa que hace unos días inició su trámite en el Congreso y aunque aclaró que no puede entregar mayores detalles sobre la forma en que operará esta empresa estatal, adelantó que la relación con la entidad que encabeza será muy estrecha, "porque el fondo realizará su labor a través de terceros, mediante concesiones y, en particular, a través de la Ley de Concesiones de Obras Públicas, y la ejecución, estructuración de los contratos, llamados a licitación y supervisión de contratos será a través de la futura Dirección General de Concesiones", precisó Abedrapo.
Sí adelantó que dado que un objetivo del fondo es que demande pocos recursos tendrá un staff básico, ya que su "brazo armado" será la Dirección de Concesiones, pero en lo relativo al plan quinquenal de proyectos que el fondo tiene que entregarle a la Dirección de Concesiones se está evaluando la opción de que el diseño de esas iniciativas se externalice a organismos internacionales que tengan especialidad en las distintas áreas que se quiera desarrollar.
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