La
Compañía Chilena de Fósforos (CCF) presentó ante el Tribunal
de la Libre
Competencia (TLDC) su respuesta al requerimiento formulado
por la Fiscalía
Nacional Económica (FNE) el pasado 20 de junio.
En el documento envíado por Fósforos se solicita al
tribunal que se rechace el requerimiento en todas sus partes, por carecer de
todo fundamento. Así la empresa refutó la acusación de abuso de posición dominante y conductas anticompetitivas realizada por el organismo fiscalizador.
Al momento de la presentación del requerimiento, el TDLC informó que éste se enmarcó en la prácticas
de Fósforos "por abusar de su posición dominante, boicoteando a
competidores e imponiendo cláusulas de exclusividad, incentivos no
lineales y otros de este tipo a los distribuidores".
En tanto, la FNE pidió la multa máxima -unos US$ 16 millones- para la compañía nacional ligada a los empresarios Juan Eduardo Errázuriz, Gustavo Romero y José Luis Vender.
En su contestación enviada hoy a la TLDC, la CCF enfatizó que "los porcentajes de participación de mercado indicados
por la FNE están
substantivamente alterados por la incorrecta definición de mercado relevante,
habiéndose sólo considerado el mercado de la comercialización de fósforos de
seguridad en Chile y no el mercado del encendido, que incluye también los
encendedores".
El documento estableció que "al no tener CCF una posición de
dominio ni en el mercado del encendido ni en la comercialización de fósforos de
seguridad, simplemente no es posible que existan de su parte, ni real ni
potencialmente, conductas que puedan ser consideradas como abusivas de una
posición inexistente".
El escrito plantea que "una de las características del
mercado del encendido en Chile es que existe una competencia enorme, real, y
potencial, dada la ausencia de toda clase de restricciones para la importación
de encendedores y fósforos".
Respecto de la posición de dominio, se argumentó que la FNE intenta asimilar el
concepto de "posición de dominio o de poder de mercado" con "participación de
mercado", "lo que es un grave error conceptual".
También descartaron los hechos imputados por la FNE como supuestamente abusivos.
La compañía negó que se haya realizado cualquier acto o conducta de
amedrentamiento en contra de proveedores de su competencia.
Igualmente, se expresó que en la actualidad la Compañía Chilena
de Fósforos no tiene vigentes contratos de exclusividad con ningún
distribuidor.
Por último, se indicó que al estipular incentivos por metas
con una parte de sus distribuidores, se ha respondido a la necesidad comercial
de detener la tendencia mundial y nacional que afecta negativamente la venta de
fósforos frente a los encendedores, y a la estructura y práctica habitual de
comercialización en el mercado, sin ánimo exclusorio alguno, y sin que haya
afectado en nada, real o potencialmente, la libre competencia.