Ingreso de ENAP a mercado mayorista de gas licuado de petróleo desata polémica y estatal defiende modelo

La nueva incursión de la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) ha estado marcada por la polémica. Luego que este miércoles la estatal lanzara oficialmente el proyecto comercial Gas de Chile, con el que la compañía ingresa al negocio de gas licuado de petróleo (GLP) domiciliario, el hito ha estado empañado por las cifras que han puesto en duda el modelo de negocio de la iniciativa.

En un oficio reservado enviado a la Cámara de Diputados, se reveló que cada cilindro del plan piloto que se implementó en 2022 tuvo un costo de $ 117 mil y el programa en cuestión $ 591 millones. Mientras, el precio promedio de venta llegó a $ 15.056 por cilindro, mucho menos que el precio normal.

“Esta iniciativa de venta de gas envasado se sustenta en sí misma, siendo una inversión responsable y financieramente sustentable”, dijo el gerente general de ENAP.

El día después diputados de Renovación Nacional (RN) ingresaron un requerimiento a Contraloría por lo que consideran “despilfarro inaceptable” de recursos por parte del Gobierno para cumplir con la promesa de “Gas a precio justo”.

El oficialismo no se quedó atrás. Por ejemplo, el jefe de la bancada de diputados PPD-independientes, Cristián Tapia, advirtió que esta es una “situación muy preocupante” y adelantó que “si aquí hay situaciones anormales, el ministro de Energía, el ministro de Desarrollo Social y ENAP tendrán que ir a darnos cuenta a nosotros, en la comisión de Minería y Energía, por qué están sucediendo esas cosas”.

Mientras, diversos secretarios de Estado fueron consultados en las actividades de la jornada sobre el costo del plan. “En diciembre, ENAP hizo una evaluación de este plan y concluyó que la última etapa del proceso, que estaba relacionada con la distribución minorista, no hacía financieramente sostenible una iniciativa que tenía otra fortaleza”, explicó el ministro de Energía, Diego Pardow. Así, sobre la base de esa experiencia, añadió, Enap anunció en diciembre que modificaría el modelo de negocios para comercializar su producción de GLP a nivel mayorista. “Ayer (miércoles) ENAP lanzó en su planta de Linares, una serie de acuerdos con distribuidores minoristas que muestran la eficacia de esta otra etapa”, dijo.

Lo propio hizo el ministro de Hacienda, Mario Marcel, quien enfatizó que “el propósito de los programas piloto es probar una determinada intervención y evaluar si es adecuada, si corresponde seguir de la manera en que estaba previsto o modificarla”.

ENAP, dijo, “solo va a actuar como mayorista, no va a intervenir en la distribución. Ya hay tres o casi cuatro compañías distribuidoras independientes que son las que van a efectuar ese trabajo de distribución”.

Con el debate instalado, en el mercado primó el hermetismo y solo hubo escuetas declaraciones. Si bien en la vereda del mercado Lipigas declinó referirse al respecto, Abastible consideró que “lo esencial es que sea bajo las mismas reglas del juego y con neutralidad competitiva”. Mientras, desde Gasco GLP, indicaron: “La competencia nos estimula e incentiva a innovar y ser cada día mejor, pero es importante que se desarrolle en igualdad de condiciones”.

En el marco del lanzamiento, el gerente general de ENAP, Julio Friedmann, ya señalaba: “Este negocio se desarrollará resguardando la neutralidad competitiva, sin tratamientos preferenciales, queremos abrir la competencia”.

La defensa de ENAP

Sin embargo, en horas de la tarde, ENAP se hizo cargo de los cuestionamientos respecto al ingreso oficial de ENAP al negocio de GLP domiciliario, a través de su filial de Gas de Chile.

“Esta iniciativa es una decisión de negocio, que está inscrita dentro del Plan Estratégico de Negocios de ENAP, como parte del desarrollo de negocios de Gas Natural (GN) y GLP”. Por ello, indicaron en un escrito, “es importante aclarar que -si bien la decisión de llevar adelante este modelo de negocios se gatilló a partir de los resultados del plan piloto realizado durante mayo y diciembre del año pasado- fue justamente a raíz de ese aprendizaje, que ENAP pudo confirmar lo que había anticipado respecto de cuál era el rol más eficiente que podía desarrollar en este mercado”.

En esa línea, recalcó que para ENAP ser el cuarto mayorista es un desarrollo de negocio que está dentro de su giro como cualquier otra comercialización de combustibles y, por tanto, “la definición de ir adelante se tomó en base a parámetros económicos como cualquier decisión de negocios”.

Friedmann fue enfático en que hoy están en una fase de desarrollo de negocios muy diferente a lo que fue el plan piloto que finalizó en diciembre. Y lanzó: “Esta iniciativa de venta de gas envasado se sustenta en sí misma, siendo una inversión responsable y financieramente sustentable, con una política de precio de costo más margen”.