¿Es responsable un banco por los errores de inversión de un cliente con demencia senil? Tribunal resuelve en caso contra JPMorgan
La resolución sienta un precedente que adquiere creciente relevancia para las empresas estadounidenses, a medida que los jubilados viven más tiempo con una reserva récord de riqueza.
Por: Bloomberg | Publicado: Viernes 4 de octubre de 2024 a las 18:35 hrs.
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Un cliente de JPMorgan Chase cuya cartera se desmoronó después de comenzar a sufrir un cuadro de demencia senil perdió una batalla legal para recuperar su fortuna a expensas del banco.
Un juez federal de Boston desestimó una demanda presentada por Peter Doelger, de 87 años, y su esposa, Yoon, acusando al banco de mantenerlo en una posición de inversión inapropiada. En un fallo revelado este viernes, el juez dijo que no parece que JPMorgan supiera sobre el deterioro cognitivo de Doelger que lo llevó a perder una fortuna de más de US$ 50 millones .
Si bien el fallo impide que su denuncia vaya a juicio, la pareja aún enfrenta una contrademanda de JPMorgan que busca recuperar los costos de la batalla legal de tres años. Un abogado de la familia dijo que están interesados en apelar la decisión del juez.
El auge y caída de la fortuna de la familia Doelger, plantean dudas sobre si las empresas de Wall Street pueden ser consideradas responsables de las pérdidas de sus clientes cuya capacidad para comprender sus carteras ha disminuido. Las empresas financieras evalúan a sus clientes para asegurarse de que sean lo suficientemente sofisticados como para realizar inversiones complejas, pero las prácticas de la industria para monitorear su situación congnitiva a medida que envejecen están menos reglamentadas.
Este será un problema cada vez más complejo, a medida que los jubilados estadounidenses viven más tiempo con una reserva récord de riqueza.
En el caso de los Doelger, JPMorgan ayudó a Peter a invertir la mayor parte del dinero de su cartera en asociaciones de petróleo y gas, en un grado que excedía con creces las directrices internas de la empresa. Aunque Peter dio fe de su experiencia en dichos activos, Yoon dijo que su esposo perdió la capacidad de comprenderlos y dependió cada vez más del asesoramiento de la empresa. Las inversiones borraron su fortuna en media década.
El juez federal de distrito Angel Kelley en Boston concluyó que los Doelger no demostraron que JPMorgan incumpliera sus obligaciones, poniendo límites altos para afirmar que una empresa se aprovechó del deterioro cognitivo de un cliente.
El juez dijo que los Doelger, su familia y otros representantes no notificaron a JPMorgan que a Peter le habían diagnosticado una enfermedad mental. El testimonio de Yoon de que le dijo a su contacto principal en el banco que su marido tenía problemas de memoria no fue suficiente para activar las políticas internas del banco destinadas a proteger a los clientes de edad avanzada, según el fallo.