Monstruos corporativos

Parece inevitable. El crecimiento que han registrado distintas empresas en los últimos años ha precipitado que muchas se estén enfrentando al desafío de elevar el espacio que requieren para su funcionamiento, pasando de ser meros ocupantes de algunos pisos a hacerse cargo de un edificio entero. Son varias las que están embarcadas en este desafío, y también varias las que han hablado de materializar su construcción, pero sin dar todavía pasos concretos.

Echamos una mirada a cuatro ejemplos de lo que está en camino: Deloitte, Entel, Security y LAN están trabajando proyectos en distintas etapas de avance. Los tres primeros en Santiago, mientras que la aerolínea por ahora tiene en mente su principal movida en Perú, con un diseño arquitectónico que bien vale la pena destacar.

Como generalidad, podemos decir que aprovechando esta renovación y muy en la cresta de la ola en lo que a tendencias se refiere, el tema ambiental es el protagonista en estas iniciativas. Casi todas hablan de diseños que permiten aprovechar mejor la luz y ahorrar en distinto tipo de insumos. Esto es lo que nos contaron los equipos detrás de cada proyecto.

La sofisticación de LAN en Perú

Hace muy pocos días LAN presentó con bombos y platillos uno de sus proyectos inmobiliarios más importantes... eso sí, no es en Chile, sino que en otro de sus mercados estrella: Perú. La firma controlada por la familia Cueto decidió instalar un edificio corporativo muy cerca del aeropuerto de Lima, que en términos arquitectónicos es de lo más rupturista y promete transformarse en un emblema de la ciudad del Rimac.

La tarea está en manos de Bernardo Fort Brescia, reconocido arquitecto peruano quien dice que el uno de los sellos del edificio es su modernidad. Algo que nos queda claro cuando vemos la fotografía de la maqueta, que muestra algo así como un abanico en su diseño.

Brescia destaca también como uno de los puntos centrales el hecho de que la construcción será completamente amigable con el medioambiente, privilegiando por ejemplo el uso de la luz natural en sus espacios.

Para hacerse una idea, la obra que ya comenzó a ejecutarse sobre un terreno de 14.284 metros cuadrados, con una inversión que asciende a unos US$ 20 millones. Albergará a un total de 1.000 empleados, que equivalen más o menos a un tercio de los trabajadores de la firma en ese país.

Deloitte y su quiebre en los muros

La cosa es simple. Debido a que su ubicación actual en Providencia les quedó chica, la consultora Deloitte decidió construir un edificio propio con un tamaño suficiente para enfrentar la fuerte expansión que ha tenido en los últimos años. Así fue como llegó al proyecto que ya están construyendo en Nueva Las Condes, barrio que se ha ido consolidando como uno de los preferidos por el sector empresarial.

Ricardo Briggs, socio líder de Deloitte cuenta que uno de los aspectos que los tiene más orgullosos es la incorporación del tema ambiental. Explica que el nuevo edificio que se emplazará en Rosario Norte con Cerro El Plomo considera entre otras cosas un máximo de eficiencia energética, ahorro en el consumo de agua, un mejor aprovechamiento de la luz natural y un sistema de climatización con la más alta tecnología, lo que les hace pensar que será uno de los edificios en Chile con la más alta calificación LEED (del U.S. Green Building Council), que certifica la condición verde.

Para hacerse una idea de cómo se llevaron todos estos objetivos a la práctica es necesario describir un poco algunas de las características del proyecto que lidera la oficina CFA Cristián Fernández Arquitectos. Lo primero es mencionar que la fachada en vez de ser un muro cortina recto, como la mayoría de los edificios, presenta diversos quiebres, que permiten aprovechar de mejor manera la luz solar al interior, lo que además facilita una reducción de la energía utilizada para la climatización interior.

En la firma cuentan que su nuevo edificio corporativo tendrá dos torres. La primera con 16 pisos, netamente para oficinas, y la segunda que además tendrá un zócalo y cinco niveles de estacionamiento subterráneos.

Entel está aquí.... en Santa Rosa

Entel sí que está esperando con ansias a que su proyecto de edificio corporativo avance lo más rápido posible. Cómo no, si hoy en día tiene cerca de 15.000 metros cuadrados de oficinas distribuidas en las torres Pacífico, Costanera y Vitacura, en la zona de El Bosque, lo que incluso les ha traído más de un problema en términos de operatividad. Por eso, sus ejecutivos dicen que la iniciativa es la solución que ayudará a mejorar la gestión y facilitará sinergias de todo tipo.

Por eso, su llegada al proyecto Parque Titanium le cambiará la vida a todos sus empleados. El año pasado, la compañía cerró con Sencorp, la firma del arquitecto Abraham Senerman, la compra de una de las tres torres que la firma construye en los terrenos del ex complejo deportivo Santa Rosa de Las Condes. Allí, en la edificio de 23 pisos que se ubicará más cerca de la rotonda Pérez Zujovic, se instalará con camas y petacas, según lo que tiene previsto, desde fines de 2012.

El edificio contará también con certificación LEED, norma que les ha permitido trabajar distintos factores para optimizar su rendimiento, en aspectos como la reducción de las emisiones de carbono y la gestión de recursos naturales como la luz solar.

Eso sí, en la compañía sostienen que mantendrá como icono su tradicional torre de la Alameda con Amunátegui y también el edificio contiguo, donde seguirán trabajando alrededor de mil personas.

El edificio espejo del Security

Siendo responsables, lo primero que tenemos que decir del nuevo edificio de Security es que no se trata de uno corporativo propiamente tal. El que comenzarán a construir en Apoquindo con Augusto Leguía sur es un espejo del corporativo que está al frente, donde se seguirán concentrando las principales oficinas del grupo.

Hecha la aclaración, debemos contar que esta nueva edificación es un negocio de Vida Security, gestionado por la Inmobiliaria del grupo. Todos de casa, salvo el diseño, que está a cargo de la oficina de arquitectos Alemparte, Barreda y Asociados, experimentados en el levantamiento de este tipo de proyectos, con ejemplos como el Birmann, el de la Cámara de Comercio de Santiago e incluso el primero del Security. Por eso la semejanza.

En líneas generales, el proyecto en cuestión estará emplazado sobre 2.500 metros cuadrados, con una superficie construida de 25.000 metros cuadrados repartidos en 17 pisos y seis niveles de subterráneos, con capacidad para unos 300 estacionamientos. Todo, por la módica suma de US$ 22 millones.

En la compañía cuentan además que están haciendo de todo para que este proyecto sea lo más verde posible. Dicen que incorporará tecnología de última generación para encajar en la categoría LEED y no en cualquier mención, sino que en la de oro, que supone un liderazgo completo en energía y diseño ambiental. Entre los secretos, dicen que muchas de sus innovaciones en estas materias están relacionadas con la climatización, aislación y la ventilación nocturna.