Desaceleración económica en Brasil obliga a Latam Airlines a hacer nuevos ajustes a su operación
Analistas esperan que el impacto de la medida, sumado a otros factores, reporte una mejora en los resultados de la compañía.
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Nuevos ajustes en la operación brasilera de Latam Airlines -ligada a las familias Cueto y Amaro- fueron anunciados aye y responden a la complejidad que está mostrando la economía de ese país.
"Frente a un escenario económico desafiante en Brasil, provocado en parte por el aumento de la inflación y la apreciación del dólar respecto del real -factores que han generado una desaceleración del sector aéreo-, TAM reducirá gradualmente a partir de ahora sus operaciones domésticas en aproximadamente 8% a 10%", señalaron en un comunicado. Pese a la decisión, TAM continuará volando a todos los destinos domésticos que opera actualmente, explicaron.
Este paquete de medidas se suma a otras acciones que ya ha tomado la compañía desde que se concretó la fusión, para mejorar el desempeño de la firma en ese país (ver recuadro).
La presidenta de TAM, Claudia Sender, explicó que tomaron esta medida para "enfrentar el difícil escenario económico de Brasil". "Por lo anterior, fue necesario buscar y realizar los ajustes operacionales que no perjudicaran la conectividad de nuestros pasajeros para así reforzar aún más nuestra competitividad en Brasil", afirmó.
Esto implicó ajustar a la baja el guidance de capacidad en ese país, que inicialmente estimaban sin variaciones respecto de 2014, y que ahora presentaría una contracción de entre 2% y 4%.
Otra de las medidas consideradas contempla la reducción de menos de 2% del personal de TAM, que en total suma 28.428 trabajadores, por lo que el ajuste no sumaría más de 569, y no afectará a los equipos de tripulación.
"Seguimos creyendo en la reanudación del crecimiento de nuestro país y este ajuste no afecta la estrategia de largo plazo de la compañía, que incluye la renovación de la flota, el proyecto de estudio de viabilidad del hub nordeste y del fortalecimiento continuo de los hubs (centro de conexiones) de Brasilia y Sao Paulo/Guarulhos", detalló Sender.
Expectativas positivas
En un contexto donde el sector aéreo brasileño ha presentado una baja en la demanda y, en materia económica, se proyecta una contracción del PIB de -1,3% a -1,5%, sumado a una inflación que debería finalizar el año por sobre 9%, y la mantención de la apreciación del dólar respecto al real, analistas dicen que la decisión de Latam parece ser correcta.
Guillermo Araya, de Renta 4, explicó que tras el ajuste "uno espera que los resultados en lo que resta del año vayan compensándose". "Por un lado están cayendo los ingresos, va a caer un poco el Ebitda, pero por otro lado están racionalizando costos. No se ha recogido 100% el ahorro del precio del combustible, donde estimamos un ahorro de US$ 900 millones este año, y pese a que el real se sigue depreciando, no va a ser lo registrado el primer trimestre", dijo.
El gerente de Estudios de Banchile Inversiones, Fernán González, señala que este ajuste "es positivo desde el punto de vista de la rentabilidad de las operaciones en Brasil, toda vez que sus principales competidores están haciendo justamente lo contrario". "Esta medida ayudaría a estabilizar en alguna medida las operaciones en ese país y por ahora no esperamos mayores ajustes en el segundo semestre", apuntó.
Los Otros ajustes
Durante el primer año de la fusión: El 2013 la firma bajó la oferta en Brasil, reemplazó aviones en vuelos internacionales de TAM, renovó el 80% de la administración y desvinculó empleados.
Menor exposición al Real: En 2014 trasladó aeronaves y deuda asociada de TAM a Latam, donde la moneda funcional es el dólar.
Venta de aviones: Ese año iniciaron un proceso de venta y arrendamiento de aviones y vendieron ocho aeronaves de TAM. Postergaron la recuperación del investment grade a 2017.
Escenario complejo: Este año anunciaron que congelaron el crecimiento de la oferta en Brasil, recortaron personal y disminuyeron exposición al Real. Anunciaron un plan de ahorros de costos a 2018 por US$ 800 millones.