El senador Ricardo Lagos Weber (PPD), uno de los parlamentarios oficialistas que ha tratado de mantener la calma en este escenario político tan convulsionado, ha apoyado al Presidente Gabriel Boric en casi todas las instancias, pero también ha reconocido que se han cometido errores. Ahora, el presidente de la Comisión de Hacienda del Senado cree que ya es momento de ponerse de acuerdo con la oposición, no para ayudar al Gobierno, sino para resolver los problemas de los chilenos y que “ya no cabe poner sobre la mesa argumentos pueriles”, advierte.
“Ahora, lo que cabe es sentarse a conversar, no el cambio del programa de Gobierno; sino cómo modificamos la propuesta de pensiones para aprobarla y avanzar; cómo hacemos que el pacto fiscal se haga realidad”.
- A propósito de la renuncia de Jackson y de la reacción de la oposición, ¿qué etapa legislativa se debería iniciar ahora?
- Lo que correspondería es sentarse a definir el destino de la reforma de pensiones, que está en la Cámara, aunando posiciones y entendiendo que todavía queda el trámite en el Senado; en materia de propuesta de pacto fiscal, el Gobierno debe insistir con la oposición para avanzar en las medidas de crecimiento y de mejor eficacia del gasto, del uso de los recursos públicos; esto último asociado a acelerar conversaciones en el marco de la Ley de Presupuestos…
- ¿Cómo así?
- Ojalá que de aquí a antes que se presente el presupuesto, la Dirección de Presupuestos y el Ministerio de Hacienda compartan qué están pensando hacer o modificaciones que se quieren proponer al presupuesto que vamos a discutir a partir de octubre, en el área de transferencias de recursos a instituciones privadas sin fines de lucro, tanto a nivel central como de gobiernos regionales. Para que lleguemos claros a la discusión de presupuestos en esta materia. Todo, en conjunto con la oposición.
- ¿Cómo se puede avanzar con la oposición en esas materias si sus dirigentes ahora quieren que el Gobierno renuncie a su programa para conversar?
- La derecha también tiene que madurar y pensar en los chilenos y en nuestro país. Ya no cabe poner sobre la mesa argumentos pueriles. Ahora lo que cabe es sentarse a conversar, no el cambio del programa de Gobierno; sino cómo modificamos la propuesta de pensiones para aprobarla y avanzar, cómo hacemos que el pacto fiscal se haga realidad. Y sobre la transferencia de recursos avancemos ahora, antes incluso de la ley presupuesto. Eso es lo que a mi juicio debería hacer la derecha y estoy seguro que lo va a hacer…
- Aparentemente en la oposición hay algunos representantes que creen que hay que pegarle al Gobierno, entonces, ¿dónde ve espacio para negociar?
- Lo que pasa es que yo no comparto esa manera de entendernos entre los chilenos. No es la manera como debemos entendernos en política. Contemos hasta 10, sentémonos a conversar, porque nos estamos jugando si la democracia es capaz de resolverle los problemas a los chilenos.
- Le insisto porque parece que no hubiera espacio para negociar.
- Nosotros vamos a hacer todos los esfuerzos para seguir conversando con aquellos interlocutores que estén disponibles para conversar… Eso es lo que corresponde. Uno hace todos los esfuerzos, estira la mano, hay gestos políticos importantes; hay que saber calibrar también hasta dónde se estira un argumento que va a ser contraproducente.
- ¿Cree que la oposición podría pagar costos políticos por las posturas que está tomando?
- Al corto plazo, eventualmente, sí. Porque se va a generar un clima muy malo. Y al mediano plazo, sin duda. Porque al mediano plazo cambian los gobiernos, pero lo que perdura es el clima que se generó antes; entonces, eso hay que tratar de evitarlo. Aquí hemos vivido un año y medio en que hay un sector que, a partir de errores propios del Gobierno también, ha tenido su veranito de San Juan. Y está bien, lo puedo entender políticamente, pero eso tiene un límite.
“He visto propuestas razonables en materia tributaria”
- Se dice que la UDI no se sentaría a conversar porque está pensando en la próxima presidencial y en llegar a la papeleta de segunda vuelta.
- Los chilenos tenemos una inteligencia promedio y nos damos cuenta cuando alguien está haciendo un punto relativamente razonable o está siendo poco constructivo. Eso, los chilenos lo detectamos al tiro. Cuando ha ocurrido todo esto y la oposición se niega a seguir conversando o generando cada día una excusa distinta, eso se observa por parte de la ciudadanía y no va a ayudar al Gobierno, pero la derecha no se la va a llevar gratis, porque a mediano plazo se hace muy difícil gobernar el país.
- ¿Por qué?
- Porque quiere decir que las instituciones democráticas no le resuelven los problemas a los chilenos. Que no los ayudamos, que está paralizado el sistema, porque alguien quiere que el gabinete sea de tal forma, que el proyecto sea tal forma… Vaya y siéntese a negociar como hicieron con 40 horas, royalty, ingreso mínimo. Todos esos fueron conversados, negociados, como quiera decirle. Por eso me cuesta creer que la oposición va a persistir en sus argumentos.
- ¿A quiénes ve disponibles a conversar en la oposición?
- Para empezar, parto de la base que se sentarán a conversar mis pares de la Comisión de Hacienda. Y le pido lo mismo a los presidentes de los partidos de la derecha. No quiero individualizar nombres, pero he visto propuestas muy razonables en materia tributaria como la de Horizontal. No todo me gusta, pero he visto a gente que es constructiva, que está dispuesta a conversar sobre algo que nos reúna, que nos permita avanzar en encontrar más recursos para financiar mejores pensiones, mejor salud, mejor seguridad y para eso es imposible que no nos podamos poner de acuerdo.
- En cuanto al pacto fiscal, el presidente de la UDI, Javier Macaya, ya dijo que con qué cara esperan que les pasen más recursos después del caso Convenios...
- Comunicacionalmente entiendo la lógica de lo que están haciendo. Es de toda lógica que si hay recursos que han sido mal habidos o mal asignados y mal gastados suena a un contrasentido decir que hay que aumentar impuestos, para juntar más recursos si los que tengo no los gasto bien. Pero ellos también saben que los recursos involucrados en el tema fundaciones están lejos de ser lo que se necesita para resolver el tema de las pensiones en Chile. Entonces, dejar de rehenes a centenares de jubilados o sin recursos para la salud, por el tema de las fundaciones, ellos saben que es desmedido, es una reacción desproporcionada. Ya hicieron el punto, obtuvieron lo que andaban buscando –a mi juicio injustamente–. Mi pregunta es en qué minuto se es responsable y se sientan a conversar. Pero si no quieren sentarse a conversar que lo digan.
- ¿Diría que el presidente de la UDI está siendo irresponsable con el país?
- Eso es exactamente lo que no voy a hacer, no voy a decir si alguien es más o menos responsable. La oposición debe asumir que es el minuto para ponerse de acuerdo y tiene una oportunidad casi única de definir de manera significativa el diseño final de las reformas; no puede imponerlo, pero como nunca antes tiene la posibilidad de incidir de la manera decisiva en el diseño final de distintas reformas y políticas públicas. Entonces, no veo por qué se van a quedar sentados, cuando tienen el sartén por el mango.
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