Ministro de Hacienda reconoce que se podría alcanzar “pequeño superávit” durante este año
Precio del cobre por sobre los US$ 4 la libra estaría impulsando la mejora en las expectativas de los ingresos del gobierno.
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Gonzalo Cerda
“De continuar con las buenas tendencias en el precio del cobre, es posible que tengamos un pequeño superávit este año”. Con esta frase el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, planteó abiertamente la posibilidad que durante 2011 el balance estructural del gobierno arroje cifras positivas.
Esta situación se puede explicar dado el buen momento que está mostrando la economía y en especial, por los altos niveles en el precio del cobre que se han registrado en el último tiempo, los que entregan un auspicioso escenario para los ingresos del gobierno.
Y aunque el ministro Larraín reconoció esta posibilidad, fue cauto al señalar que “todavía no está claro que vayamos a tener un superávit” pero no descartó que esto sea posible.
La principal razón es que el presupuesto elaborado por el gobierno se realizó con un precio del cobre determinado en US$ 3,24 la libra y actualmente, los expertos sostienen que dado los niveles en los que se transa en metal rojo (por sobre los US$ 4 por libra), es muy difícil pensar que durante 2011 no se alcancen cifras positivas.
El actual escenario macroeconómico se contrasta con la modificación que realizó el gobierno durante agosto del año pasado, donde corrigió la meta fiscal de 0% a -1%, postergando una promesa de campaña del presidente Sebastián Piñera. Una segunda modificación que sufrió el balance fiscal del gobierno fue durante la elaboración del Presupuesto 2011, donde el gobierno situaba su estimación en un -0,8% de balance devengado.
Optimismo en el mercado
Para los economistas del mercado es indudable que el buen precio del cobre ayudaría a lograr este superávit este año.
Además, explican que el crecimiento de la economía está siendo impulsado, principalmente, por la demanda interna, lo significaría una mayor recaudación tributaria para el gobierno.
Para el economista jefe de BICE Inversiones, Cristóbal Doberti, esta situación se sustenta en que “en términos de precio del cobre, el gobierno estaba asumiendo un valor de US$ 3,24, lo que durante este año va a ser superior, con un precio promedio cercano a US$ 4 por libra”.
“Podríamos alcanzar un balance estructural, incluso no es descartable tener superávit durante este año, aunque nuestras estimaciones son, de un pleno balance durante 2011”, agregó el analista.
Por su parte, el economista jefe de BCI, Jorge Selaive, señaló que actualmente se está viendo una muy buena recaudación en dólares, que se contrasta con la intensa recaudación tributaria en pesos que se está efectuando durante este año, aunque esto no sería suficiente para cerrar la brecha explicó.
“Lo más probable es que si tengamos un superávit, y el precio del cobre sobre los US$ 4 asienta esta posibilidad” agregó. Esto le entrega certezas al gobierno para que comience a sincerar sus cifras.
Y es que en el mercado los auspiciosos precios del cobre permiten prevér que la recaudación por dólares esté año aumentará significativamente.
“Son varios los motivos que llevarán a tener un superávit, el ingreso de dólares será mucho mayor, por sobre lo contemplado en el presupuesto anterior, de hecho explicarían alrededor de
US$ 5.000 millones adicionales, (algo cercano a 2% del PIB)”, sostuvo el economista jefe de BanChile Inversiones, Rodrigo Aravena.
No obstante, el experto advierte que aunque se registren cifras positivas a fin de año, igualmente, se podría registrar un déficit en términos estructurales.
“Un elemento clave que va a surgir este año, en la discusión presupuestaria, tiene que ver con el rol que desempeñen los parámetros estructurales, principalmente el precio del cobre, pero el precio de largo plazo, dado que un aumento en este valor, que es muy probable que ocurra, daría espacio para que el gasto fiscal crezca a una tasa aún elevada”.
Esto ocurriría, explicó Aravena, ya que al subir el precio de tendencia una porción mayor de ingresos se considerarían como permanentes.
Otro factor que puede ser preponderante, explica el economista jefe de BBVA, Alejandro Puente, es el tema de la inflación ya que “la base para cobrar algunos impuestos, con un mayor nivel de inflación aumentaría y desencadernaría este posible superávit”.