La noche del miércoles, el Consejo Fiscal Autónomo (CFA) envió un documento de 25 páginas a la Convención Constitucional en el cual entrega su visión sobre la responsabilidad en el manejo de las finanzas públicas de cara a la nueva Constitución.
Entre dichas recomendaciones, resalta la opción de consagrar la responsabilidad y sostenibilidad fiscal en la próxima carta magna, algo que sería un “gran aporte” en la percepción de solvencia de las arcas públicas chilenas, considera el presidente del CFA, Jorge Desormeaux.
- ¿La idea es no innovar en la facultad exclusiva del Ejecutivo en materia de gasto?
- Nos referimos a algunos aspectos como éste, que pueden estar o no estar en la Constitución. Uno de ellos es la iniciativa exclusiva en materia de gasto y otra que los impuestos no puedan ser atribuidos, pero simplemente los describimos, ya que son parte de la Constitución vigente. Creemos que son temas que hay que abordar, pero nos concentramos fundamentalmente en estos otros dos principios que creemos que permitirían financiar en forma sana el gasto social y no endeudar a las futuras generaciones, para contribuir a la equidad intergeneracional. Debe haber un cuidado de no gravar a las generaciones futuras con una carga fiscal mayor para satisfacer a la generación presente.
- Pero la responsabilidad fiscal va de la mano con ponerle bordes a las facultades de gasto. Ya lo vimos con los retiros de fondos, ¿no?
- Todo eso ocurrió en medio de una emergencia. Hay muchos juicios que se pueden hacer, pero no es nuestro rol, nuestro rol es básicamente evaluar las consecuencias de esas medidas, pero no pronunciarnos sobre su bondad. Eso le corresponde a otras instituciones.
- ¿No ve como un peligro que se flexibilice la facultad exclusiva del Ejecutivo en materia de gasto?
- El documento que elaboramos destaca que esta, que es una tradición muy antigua de nuestro país, que nace con la Constitución de 1925, que es nuevamente reformada en 1943 y luego en 1970, ha sido parte de la tradición fiscal de nuestro país por casi un siglo. Obviamente que es algo que hay que considerar, pero nosotros no nos pronunciamos. Si me preguntan a mí, sería bueno prestar atención a esa tradición, particularmente si se mantiene un régimen presidencial.
- Viendo cómo se ha desarrollado el debate de la Convención en estos seis meses, ¿cuál es su esperanza de que estos principios se incluyan en la nueva Constitución?
- Nos gustaría que les prestaran atención. Realmente el país entero se vería favorecido. La experiencia nuestra es que en la medida que uno respete esos principios, habrá mayores posibilidades de crecimiento económico, generación de empleo, y mayor capacidad para el gasto social.
El compromiso fiscal de Boric
- Ustedes recibieron a los equipos programáticos de la candidatura de Boric. ¿Cree que los números fiscales de su programa calzan?
- Ellos fueron muy claros en términos de que pensaban cumplir con todas las recomendaciones que nosotros hicimos a la comisión mixta de Presupuestos en septiembre. En su presentación dijeron que estaban de acuerdo con el Presupuesto con un déficit estructural de 3,9% del PIB que fue aprobado por el Parlamento. Además, ellos suscribieron las sendas de convergencia más rápidas que presentaba nuestro informe. Ambas son consistentes con la sostenibilidad fiscal, de manera que por lo menos el equipo de Boric ha tomado un compromiso muy fuerte con nosotros y con la opinión pública.
- ¿Se puede apostar por una consolidación fiscal en un período marcado por mayores compromisos de gasto?
- La verdad es que nosotros no tenemos por qué dudar de eso. Ellos hicieron un planteamiento y dijeron que suscribían todas nuestras recomendaciones. Y hay que tener claro que incluso con este Presupuesto para 2022, que significa un importante recorte de gasto, no está garantizada la sostenibilidad. La verdad es que hay que seguir reduciendo el gasto público en relación al PIB y ellos se comprometieron a una senda de convergencia que contempla una reducción de entre medio punto y un punto de PIB por año. Ambas son compatibles con la sostenibilidad fiscal. Nosotros no tenemos por qué desconfiar de ese compromiso.
- ¿Lo deja tranquilo lo que le presentó el equipo de Boric?
- Ellos han suscrito las metas de convergencia que hemos recomendado. Ahora, respecto de cómo es la bajada de eso, ellos presentaron su programa, con un fuerte énfasis en mayores impuestos. Pero eso es algo que, en definitiva, van a decidir el Poder Ejecutivo y Legislativo. Nosotros no podemos entrar en esa discusión. Pero de que va a ser un año difícil, no le quepa duda, va a ser un año difícil cualquiera que haya sido la administración triunfante.
- ¿Cuál es el principal desafío en 2022, pensando en que se viene una desaceleración, un cambio de gobierno y la discusión constitucional?
- Lo más difícil va a ser no defraudar expectativas. Cuando una administración parte tiene una especie de luna de miel en la cual todo parece posible y crecen las aspiraciones. Pero en la vida real esto es más complejo. Yo me quedaría con esa definición.
- ¿Están las condiciones para, en este escenario tan revuelto, efectivamente reordenar un poco las finanzas públicas?
- El Presupuesto fiscal del 2022 ya considera una reducción significativa del gasto público de 22,5%, lo que parecía imposible pero que es algo necesario. Las avenidas que se abren después de ese recorte para continuar con la senda de convergencia son mucho más favorables que si no se hubiera hecho dicho ajuste. Eso lo ha entendido todo el mundo, incluido el político y es algo muy saludable para el país. Este país siempre ha valorado la solvencia de las finanzas públicas y es una de las bases de nuestra fortaleza como economía.
- ¿Confía en que ese principio se va a mantener hacia adelante, independiente de quién gobierne y del resultado de la Convención?
- Bueno, es lo que yo escucho de parte de las distintas autoridades. No he visto ninguna voz de parte de las nuevas autoridades en contra de ese principio de responsabilidad fiscal, así que yo confío en que así va a ser.
- ¿Esa perspectiva de que 2022 será un año difícil cómo se traduce en las proyecciones? El Banco Central anticipó que el año realmente complejo podría ser el 2023
- Efectivamente en 2022 vamos a tener un frenazo importante del consumo y de la inversión. Ahora, lo que ocurra en 2023 va a depender de muchas otras cosas, entre ellas las señales que dé la nueva administración. Si esas señales son favorables para el emprendimiento y para la inversión, la historia del 2023 puede ser otra.
Aún falta información sobre los equipos, las políticas que se van a seguir, la progresión que van a tener. Cuando tengamos esa información, es posible que las variables que hoy miden la incertidumbre, como el tipo de cambio, comiencen a estabilizarse.
Economista dejaría la presidencia
del CFA cuando asuma el nuevo gobierno
- ¿Cuáles serán los ejes del CFA para 2022?
- Va a ser un año de continuidad en muchos aspectos, pero hemos encargado dos estudios a nivel nacional e internacional. Uno para estudiar las prácticas constitucionales en materia fiscal en diferentes países y aprender de ello. También estamos licitando un estudio adicional para estimar un nivel de deuda prudente para Chile, con estimaciones de un nivel adecuado de balance estructural y de los fondos soberanos y sus implicancias para la calificación de riesgo de la economía.
- ¿Estaría dispuesto a continuar en el cargo en el próximo gobierno?
- Creo que es hora de hacer un cambio. He tenido una responsabilidad que agradezco mucho.
Me ha tocado dirigir a un grupo humano excepcional, lo que agradezco. Pero la verdad es que creo que es bueno que haya un recambio.
Ha sido una experiencia muy valiosa, con un aprendizaje importante en el camino.
Cada persona que hemos contratado ha terminado siendo realmente un aporte excepcional. No estaríamos donde estamos si no es por el equipo que hemos armado.
PGU y financiamiento: "El ideal es
que esté todo en un solo proyecto"
Desormeaux cree que la discusión que se ha abierto tiene "mérito" y dice que en los próximos días entregarán un informe a la Cámara.
El CFA nuevamente será un actor clave en el Congreso, luego de que la oposición en la Cámara y el Senado le solicitara una opinión respecto al financiamiento de la Pensión Garantizada Universal (PGU), proyecto que se vota hoy en la Sala de la Cámara.
Esto luego de un duro intercambio de cartas la semana pasada entre el Ejecutivo y economistas como Andrea Repetto, Rodrigo Valdés, Eduardo Engel y José De Gregorio, que pusieron en duda la propuesta financiera del gobierno.
- ¿En qué plazos estarían en condiciones de responder a los oficios que envió la Cámara y el Senado por el financiamiento de la PGU?
- Estamos trabajando en ello. Estamos todavía recopilando antecedentes y los que tenemos hoy no son completos. Vamos a tener esta misma tarde (jueves) una presentación de la Dirección de Presupuestos y, con ello, vamos a elaborar un informe que se lo haremos llegar a la comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados. Mientras tanto no podemos adelantar nada.
- ¿Cree que tiene mérito el debate que se ha levantado?
- Sin duda que tiene mérito, porque es una de las principales partidas de gasto en el país y tenemos un fenómeno que es el envejecimiento de la población. Entonces, la verdad es que las personas que van a estar recibiendo o aspirando a pensiones a futuro van a ser una proporción mucho mayor de la población. Es un tema que hay que hacerlo con mucha prudencia y asegurarse de que esté el financiamiento a partir de ingresos permanentes. Esa es nuestra responsabilidad y la vamos a ejercer.
- ¿No le parece raro que se haya separado el proyecto de PGU de su financiamiento? Ahí también se ha centrado mucho el debate.
- Mi impresión es que el ideal es que esté todo en un solo proyecto. En esto la circunstancia ha sido fruto de la celeridad con que se ha estado actuando. El ideal es que esto esté en un solo proyecto y tuviéramos claro cuáles son los ingresos permanentes que van a financiar el gasto pensiones en el futuro.
- ¿Cuándo podrían entregar una visión al respecto?
- Tenemos un plazo, en el caso de la comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, que es la primera semana de enero. Prefiero no precisarlo más porque no tenemos mucha certeza en ese sentido. Pero se entregará dentro de muy poco.
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