Trabajadores certificados por ChileValora serán reconocidos por la educación superior

Desde 2008, ChileValora es la entidad local a cargo de reconocer “el saber hacer de los trabajadores y trabajadoras del país”. O sea, la institución a cargo de validar formalmente las competencias laborales de las personas mediante la certificación. Un instrumento cada vez validado.

Un hecho decidor es que el organismo liderado en la actualidad por Ximena Rivillo -que además tiene participación en el directorio de dirigentes empresariales y sindicales- ha impulsado el diálogo y acciones conjuntas con  distintas instituciones ligadas a la formación de talento para dar un mayor reconocimiento a las distintas habilidades.

Uno de los ejes de trabajo de la directora ejecutiva ha tendido a consolidar un enfoque transversal en el diseño de mallas curriculares basado en competencias laborales “que reconozcan los aprendizajes laborales previos y las certificaciones de ChileValora en el desarrollo de las trayectorias formativas y laborales de estudiantes, trabajadoras y trabajadores”, explican desde el servicio.

Ximena Rivillo, directora ejecutiva de ChileValora

¿Qué significa esto?  Que las certificaciones de competencias que entrega el servicio sean reconocidas por las instituciones educacionales, y que se transformen en un puntapié inicial para que las personas vean en su certificación una carta de entrada a la educación.

Actualmente ChileValora tiene convenios firmados con 34 instituciones de educación superior en Chile, entre universidades, institutos profesionales y centros de formación técnica públicos y privados.

De estos, 19 cuentan con reconocimiento de las certificaciones en sus carreras técnicas para que las personas con alguna formación puedan convalidar asignaturas en la admisión, disminuir carga académica y ahorrar tiempo de estudio.

Con los 14 restantes se trabaja para alcanzar prontamente la convergencia curricular.

“Hoy, 110 carreras de 19 casas de estudio a lo largo de Chile reconocen algunas de las certificaciones de competencias laborales en sus procesos de admisión, lo que les permite a las personas certificadas en alguno de los 180 perfiles en convenio, convalidar asignaturas y disminuir su carga académica”, destacaron desde el servicio.

Gracias al convenio de articulación firmado entre ChileValora e Inacap, por ejemplo, tres trabajadoras pertenecientes al Sindicato de Manipuladoras de Alimentos Nicanor Parra fueron aceptadas en la carrera de Gastronomía de dicha casa de estudios con sede en Chillán para el periodo lectivo 2024.

Ellas, certificadas en el perfil laboral de ChileValora Manipulador (a) del Programa de Alimentación Escolar, en la Región de Ñuble, iniciaron sus estudios bajo la modalidad del convenio que permite disminuir carga académica.

“La inclusión de estas trabajadoras a la educación superior técnico profesional, ejemplifica la importancia de la educación continua y la formación profesional, motivando a más trabajadores y trabajadoras a seguir caminos similares”, destacan en el organismo.

Al respecto, agregan que se trata de “un ejemplo exitoso de cómo la certificación de competencias laborales y la convergencia curricular pueden transformar vidas, promoviendo una educación inclusiva y un mercado laboral más competente y capacitado”.

Comisión asesora

En el ámbito educacional, la alianza con instituciones educacionales no es el único espacio de acción de ChileValora.

El servicio, además, integra la Comisión Asesora de Cualificaciones Técnico Profesional. Una instancia impulsada por el Ministerio de Educación, de carácter público, en la que también participan el Ministerio del Trabajo, el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence), CORFO, la Comisión Nacional de Acreditación y el Ministerio de Economía Fomento y Turismo.

La misión de esta entidad es asesorar en el proceso de diseño, elaboración, implementación, revisión y actualización del Marco de Cualificaciones Técnico Profesional.

“La comisión asesora busca promover los aprendizajes a lo largo de la vida de las personas, la articulación entre distintos niveles educativos y entre la educación formal con la formación para el trabajo. Además de la vinculación de las demandas del mundo del trabajo y la sociedad con la oferta formativa y educativa”, explican desde ChileValora.

El trabajo realizado

Desde 2008, ChileValora ha realizado más de 212 mil procesos de certificación que han significado más de 192 mil certificaciones laborales.

Al mirar datos más recientes, se observa que entre 2023 y abril de 2024, se ejecutaron 26.983 procesos de evaluación y certificación de competencias laborales, con una tasa de aprobación del 88%, llegando a 23.066 certificaciones.

De la totalidad, los cinco sectores que acumulan más certificaciones para el periodo corresponden a Construcción (34%), impulsado por el instalador eléctrico clase D; Servicios (24%), estimulado por el Gestor/a de Inclusión Laboral; Minería Metálica (8,3%) Gastronomía, Hotelería y Turismo (8,2%), y Servicios de salud y asistencia social (5%); promovido principalmente por el perfil cuidador(a) primario (a). Estos cinco sectores en conjunto, agrupan el 79% de las certificaciones otorgadas en el periodo.

Respecto del nivel educativo de las personas certificadas en 2023-abril 2024, los datos grafican que el 55% de las certificaciones otorgadas son a personas que cuentan con educación media completa o menos. Por otro lado, el 23% registra educación universitaria completa, y solo un 13% cuenta con educación superior técnica completa.