Economistas aún ven señales de debilidad en el mercado laboral y persiste la inquietud por la informalidad

El mercado laboral sigue dando señales de debilidad. De hecho, la tasa de desocupación nacional se ubicó en 8,9% durante el trimestre comprendido entre junio y agosto -el nivel más alto del año-, según informó este lunes el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

Si bien se trata de una mínima diferencia a favor frente al 9% de hace 12 meses, implica un alza frente al 8,7% de mayo-julio.

Esto se replica a la hora de mirar la fuerza de trabajo y la creación de empleo, que en términos anuales fueron de 2,4% y 2,5%; mientras que en términos trimestrales mostraron nulo movimiento y una baja de 0,2%, respectivamente.

Entre las mujeres, la tasa de desempleo subió a 9,4%, en tanto que la de los hombres bajó a 8,5%.

“Las cifras de empleo de agosto reflejan una economía que está teniendo dificultades en generar empleo”, advirtieron desde Coopeuch. Y agregaron que, descontando la estacionalidad, en dos meses se han destruido 28.509 puestos de trabajo, “la peor cifra desde junio del 2021”.

Una preocupación que compartieron desde Clapes UC, desde donde plantearon que desde febrero la cantidad necesaria de empleos para recuperar la tasa de ocupación previa al Covid-19 ha ido en aumento.

“Para restablecer la tasa de ocupación prepandemia se requieren aproximadamente 308 mil empleos adicionales”, dijeron y agregaron que la brecha nuevamente se amplió respecto al trimestre anterior, cuando se situaba en 278 mil empleos.

“Los hombres presentan una brecha para recuperar la tasa de participación prepandemia de 1,8 pp. mientras que la tasa de participación de las mujeres no muestra variación respecto a 2019”, explicó el subdirector técnico del INE, Leonardo González.

Considerando este contexto, en Inversiones Security proyectaron que la tasa de desempleo “debiera continuar con una leve tendencia al alza ante una normalización de la fuerza de trabajo”.

Con todo, para el gerente de Estudios de la consultura Gemines, Alejandro Fernández, estos malos indicadores responden “a las políticas anti empleo y no a la debilidad de la actividad”.

El rol del sector público

Tal como ha sido la dinámica en trimestres previos, nuevamente el aumento de la población ocupada (2,5%) se debió al aporte de los sectores comercio (4,1%), enseñanza (3,8%), administración pública (3,6%) y otras actividades de servicio (5,6%).

En la expansión de las personas con trabajo, además, hubo una alta incidencia de la ocupación informal (5,9%, lo que correspondió a 140.921 personas), seguida de la ocupación formal (1,3%, lo que equivale a 88.700 personas).

Ante este comportamiento informado por el INE, la tasa de ocupación informal se ubicó en 27,6%, con un alza de 0,9 pp. en 12 meses.

Las personas ocupadas informales aumentaron 5,9%, incididas tanto por los hombres (5,6%) como por las mujeres (6,1%); y según sector económico, el ascenso se debió, principalmente, a comercio (13,5%) y otras actividades de servicios (11,5%), mientras que, por categoría ocupacional, incidió trabajadores por cuenta propia (9,5%) y empleadores (51,8%).