Anticipándose al pronto despacho del proyecto de ley desde la Cámara de Diputados, la ministra del Trabajo, Ximena Rincón, reconoció que hay espacio para que el Ejecutivo ingrese nuevas indicaciones a la reforma laboral durante su tramitación en el Senado.
"(En el Senado) vamos a poner algunas cosas que no logramos instalar en la Cámara de Diputados, pero creo que vamos a ser capaces en la Cámara de Diputados de despachar tranquilamente la integralidad de la reforma", dijo la ministra ayer tras participar de Enandes 2015.
Desde la Cámara Alta, el presidente de la comisión de Trabajo, Juan Pablo Letelier, ha dicho que espera recibir la reforma para iniciar su debate en junio.
En las últimas sesiones los parlamentarios de la Nueva Mayoría y de la Alianza han pedido realizar ajustes a los quórum de los pactos de adaptabilidad laboral y a los acuerdos para la extensión de beneficios logrados en la negociación colectiva.
La oposición también ha planteado la necesidad de que se le otorgue derecho a huelga y fuero a los grupos negociadores. Estos podrán existir sólo si en una empresa no hay un sindicato formalmente constituido.
Refiriéndose a la discusión aún vigente en la Cámara Baja, la secretaria de Estado se mostró confiada en que se despachará el proyecto en los términos planteados por el gobierno. "Vamos a lograr hacer una serie de perfeccionamientos importantes y necesarios, como por ejemplo, los que se aprobaron ayer (el lunes), por un lado que haya derecho a huelga efectivo pero que existan servicios mínimos de tal manera de no afectar ni los bienes ni la vida ni la seguridad, la salud en las necesidades básicas de la población", señaló Rincón.
Añadió que "el equilibrio siempre es necesario. Que nuestros trabajadores puedan negociar, puedan organizarse, que fortalezca los sindicatos, es algo en lo que estábamos en deuda".
Clima de desconfianza
En su intervención en Enandes, Rincón se refirió al clima de desconfianza que hay en el país.
"En un momento de la coyuntura de nuestro país, donde las confianzas no están presentes en nuestras relaciones, ni en nuestros líderes, ni en nuestros pares, ni en nuestros vecinos, porque los indicadores de desconfianza son preocupantes en nuestro país, creo que tenemos que empezar a mirar con más atención qué estamos haciendo en nuestro entorno (...) y hacernos cargo de que hay algo o muchas cosas que no estamos haciendo bien e impiden que nos sintamos realmente felices", expresó.