Fundación Carlos Vial Espantoso: “Nos gustaría que se estudiara el reparto de utilidades”
Destaca la idea de que capital y trabajo sean socios en empresa. También anuncia creación de centro de estudios con la UC.
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El 5 de enero la Fundación Carlos Vial Espantoso abrió las postulaciones al premio con el cual, desde hace 15 años, busca distinguir a las empresas que construyen relaciones laborales de confianza y valoran el aporte de los trabajadores en sus resultados.
Pero este 2015 hay novedades, que se condicen con el interés de contribuir a un ambiente de mayor colaboración al interior de las compañías y, a su vez, coinciden con el debate de la reforma laboral.
"Este año entregaremos un diagnóstico a todos los postulantes, desde los datos que nos entregan en el formulario de postulación, para aportar con planes de acción concretos e implementables para iniciar un camino de cambio en su modelo de relaciones laborales", explica la directora ejecutiva de la entidad, Isabel Vial.
Un paso al que se suma la formación de un Centro Estudios Laborales que harán con la Universidad Católica (UC).
- ¿Qué le parece el proyecto de reforma laboral?
- Siempre es positivo que se reflexione y debata sobre cómo mejorar las relaciones laborales al interior de las empresas. Claramente necesitamos hacer cambios en materia laboral, lo importante es la calidad de las reformas que se impulsen y que éstas apunten a mejores oportunidades de desarrollo para los trabajadores y mayor rentabilidad en las compañías. Es esencial que la discusión en el Congreso se realice con altura de miras, con generosidad, desde la óptica del mundo del trabajo. Nos preocupa que las negociaciones, que ya son duras y difíciles, se complejicen y creen un clima que no colabore a un buen diálogo.
Nosotros a través del Premio Carlos Vial Espantoso, podemos dar fe de que una empresa con buenos líderes sindicales se reúne periódicamente con el gerente general, que tienen agenda de trabajo en conjunto, que se capacitan, que son escuchados y sus ideas de mejoras son tomadas en cuenta entre otros aspectos, y puede aspirar a mayores niveles de productividad.
- ¿Cuáles debieran ser los ejes de una reforma laboral?
- Nuestro país necesita una mirada en el largo plazo, con políticas que incentiven la creación de empleos de calidad, no de cantidad. No hay discrepancia alguna de que debemos potenciar al sector de mujeres no ejecutivas, las más vulnerables, y atraer a los jóvenes, muchos de los cuales no estudian ni trabajan. Creemos que el crecimiento del empleo debiera enfocarse en estos grupos, pero se necesitan incentivos concretos, realizar estudios, identificar los sectores donde falta empleo y definir cuáles son los más productivos, pero lo más importante es capacitar.
Con la UC estamos formando un Centro Estudios Laborales, a través del cual buscamos incentivar y producir investigación de alto nivel en el ámbito de la gestión de personas y las relaciones laborales. De esta forma, queremos ser el punto de encuentro entre el empresariado, la academia, los trabajadores, los estudiantes y la política. De esta forma, uno de nuestros focos será trabajar en una agenda propositiva.
Hoy vemos una real disonancia entre la complejidad del problema y las metodologías que se están utilizando para discutirlo.
- ¿Cuál es la receta para subir la productividad y salarios?
- Ojalá existiera una receta, sería todo bastante más simple. El mundo está en constante cambio y las empresas tienen que ir adaptándose a los nuevos desafíos que se les presentan. Esto significa más libertad, más capacitación, más apertura, más diálogo. El mundo moderno está abriendo fronteras, no rigidizando. Debemos tener claras las reglas del juego, simplificar la cancha donde se juega, no hacerla más difícil.
Lo que debemos promover a través de esta reforma es la confianza y la colaboración al interior de las empresas, para desde ahí trabajar contra los elevados índices de inequidad que nos afectan como país. Si forzamos en demasía la productividad, terminarán pagando los costos justamente quienes queremos proteger a través de esta reforma, los trabajadores.
Como fundación nos gustaría que se estudiara el reparto de utilidades. Carlos Vial Espantoso promovía que capital y trabajo debieran ser socios y que las empresas debieran hacer participar a sus trabajadores en relación a su aporte a la rentabilidad de la empresa. Hoy, muchas empresas lo realizan a través de remuneraciones variables y bonos por resultados que impactan en la rentabilidad y en mejores remuneraciones. Pero como decía Carlos Vial Espantoso no puede ser una cuota arbitraria, sino un estudio serio que establezca la cuota que en los resultados de la empresa debe asignarse al trabajo y al capital.
- ¿Cuál debiera ser el foco de una reforma con las PYME?
- Hay que esperar las preguntas y respuestas que surgirán durante la discusión. Las PYME necesitan gestión y ahí las grandes empresas tienen un tremendo desafío con sus empresas contratistas. El empresario PYME se enfrenta diariamente a una soledad de mando enorme, por lo que tenemos que apoyarlo y no alejarlo más de su equipo.
En la PYME estriba una porción significativa de la capacidad productiva del país. Son ellas las que pueden incidir en el crecimiento de nuestra economía, tienen mucho espacio para desarrollarse, innovar pero en innumerables ocasiones han sido rezagadas por políticas que dificultan su desarrollo, como el difícil acceso a financiamiento, altos costos para realizar capacitación a sus trabajadores, y falta de espacios para innovar.
Hoy se están haciendo muchos esfuerzos para destacar la relevancia de las PYME a través de fondos de la Corfo y nosotros aplaudimos el ambiente de colaboración y búsqueda de soluciones que existen en los jóvenes emprendedores. Otro apoyo importante son los jóvenes de primera generación universitaria que están integrando gestión y trabajo a las empresas de sus familiares.