Claudio Orrego se reúne con Boric: pide más facultades para gobernadores e insiste en que no será candidato presidencial

“Mi único plan es ser gobernador en los próximos cuatro años. Agradezco los apoyos, pero deberán buscar a otros rostros del progresismo para esa tarea”, señaló el gobernador reelecto por la Región Metropolitana, Claudio Orrego, luego de su reunión en La Moneda con el Presidente Gabriel Boric al ser consultado por una eventual candidatura presidencial.

Orrego se entrevistó por una hora con el mandatario en la sede de Gobierno, oportunidad en que analizaron la agenda que interesa a los gobernadores fortaleciendo sus competencias en desarrollo urbano y otras materias, sobre todo en seguridad -que dijo- es la primera prioridad de la ciudadanía. Este último punto, adelantó que próximamente se va a crear una mesa de trabajo entre el Ejecutivo y las autoridades regionales.

Orrego señaló luego de la reunión que “le agradecí que ya estamos en pleno proceso de traspaso de las facultades y ordenamiento territorial desde el Ministerio de Vivienda al Gobierno Regional y de la Unidad Operativa de Control de Transito, que va a pasar a depender 100% del Gobierno Regional”.

El exintendente dijo que le planteó a Boric que, dentro de los temas pendientes que esperan se avance en los próximos meses, es poner urgencia al proyecto de ley que entrega a los Gobiernos Regionales la facultad de prevención del delito en las regiones. “El Presidente me ha señalado que vamos a tener en los próximos días una reunión con los gobernadores y con ministra del Interior y subsecretaria de Prevención del Delito, para ver cómo avanzar en este proyecto”.

Al hacer nuevamente un balance de la jornada electoral del pasado domingo, Orrego dijo que “la derecha planteó que este era un plebiscito al Gobierno, entre derecha e izquierda, entre Apruebo y Rechazo, y se equivocaron, porque si hubo algún plebiscito ayer fue sobre una forma de hacer política. Creo que la derecha se equivoca cuando plantea la división, la confrontación o mira más el pasado que el futuro; o cuando privilegia liderazgos agresivos o incluso violentos. La gente no quiere más violencia ni física ni verbal, la gente quiere moderación”.