Por Rodolfo Carrasco M.
Un anticipo de lo que sucederá en la próxima discusión del presupuesto 2014 en el Parlamento con el debate respecto al nivel de flexibilidad que debe contener dicho erario, que si bien enviará la actual administración será ejecutada por quien resulte electo en las elecciones presidenciales de fin de año, realizaron algunos integrantes de la comisión mixta de Presupuestos.
El presidente de la instancia, senador Andrés Zaldívar (DC) sostuvo que ya conversó con el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, sobre el tema. “Se lo he planteado y le he dicho que debe ser un presupuesto de continuidad y debe haber una parte importante en el Tesoro Público que permita al nuevo gobierno, cualquiera que sea, disponer de recursos y flexibilidad para cumplir sus compromisos programáticos”.
Sin embargo, reconoció que fue una sugerencia y que quien debe resolver es el encargado de las finanzas públicas. “Ojalá que cumpla, hay que ver cómo viene el planteamiento. No creo que el gobierno haga un presupuesto muy innovativo en su último ejercicio o muy restrictivo. Además, nosotros tenemos facultades para poder modificarlo si así fuera”.
También señaló que será importante conocer el presupuesto con anticipación a los plazos habituales debido a las fechas de las elecciones parlamentarias y presidenciales. “Tenemos como máximo 60 días para su despacho, pero si viene como un proyecto de continuidad y flexibilidad es perfectamente posible un despacho más rápido sin mucha discusión, espero que no haya dificultades”, explica.
Adelantó que, a su juicio, “el crecimiento del gasto debe ser equivalente a lo que se estime de crecimiento del país no más que eso, creo que en torno al 5%”.
Para el senador Ricardo Lagos Weber (PPD), quien también es integrante del comando de la candidata presidencial Michelle Bachelet, lo que pueda suceder con el presupuesto 2014 es incierto. “No sé que esperar de este gobierno, lo digo con algo de resignación y tristeza, pero esperaría que hicieran lo que han hecho otros gobiernos que cuando definen un presupuesto que será ejecutado por una administración distinta, sin saber el color político de la misma, se hacen esfuerzos presupuestarios de tal forma de dejar recursos disponibles de manera de otorgar cierta flexibilidad a quien asuma; para que el gobierno entrante no quede amarrado a lo que se apruebe en el presupuesto”.
Señaló que “espero que lo haga, pero en algunas tradiciones republicanas esta administración no ha estado a la altura de mantenerlas, máxime la cartera de Hacienda. Cuando un ministro sostiene que la desaceleración de la economía chilena es producto de una discusión política, eso me hace pensar que el ministro de Hacienda a la última reunión de ministros de la OCDE -a la que asistió durante siete días- parece que fue más a ´viaticar´, que a leer los informes que le prepararon”.
Cumplir compromisos
En tanto, el senador José García (RN) recordó que cada vez que “hemos enfrentado una situación como esta, normalmente lo que ocurre es que se deja en la partida del Tesoro Público una partida de recursos, recuerdo que en el caso de cuando asumió el presidente Piñera fue algo así como US$ 300 millones, de tal manera que quien asume pueda disponer de ello en conformidad a la ley”.
El parlamentario agregó que “lo grueso de esos recursos fueron utilizados en el llamado bono marzo de 2010, pero así se ha hecho cada vez, de manera que el mandatario que asume pueda cumplir con algunas de las medidas que ofreció en campaña”.
Consultado por la posibilidad de que los candidatos a la presidencia puedan exponer ante la comisión para plantear su énfasis sobre el presupuesto dijo que “alguna vez lo hicimos, los escuchamos en la Comisión Mixta, pero este año vamos a estar más apretados con los plazos, por la elección del 17 de noviembre; y vamos a anticipar la discusión del presupuesto”.
De todas formas, precisó que “vamos a mantener una cantidad de recursos razonables dentro de lo que permita la regla estructural. Ya tenemos una restricción real y es que estamos con déficit estructural, pero tengo la certeza que la tradición republicana se mantendrá”.
El diputado Ernesto Silva (UDI) planteó que “más que poder definir que grados de flexibilidad tiene que tener el siguiente gobierno en lo que hay que ponerse de acuerdo es en cuáles serán los temas centrales”.
Recordó que “si uno revisa los presupuestos de los últimos años no ha existido gran debate respecto de la discrecionalidad para la implementación de los recursos, sino que las prioridades y cómo se materializan”.
Y sostuvo que la administración financiera del Estado establece criterios por los cuales se asignan recursos, se pueden hacer reajustes o suplementar, “sería un error focalizar el debate sólo en la flexibilidad. Hay grados suficientes de libertad para que cada administración administre sus finanzas”, concluyó.
La palabra ahora la tiene el Presidente de la República, el ministro de Hacienda, y la directora de Presupuestos.