Por Carlos Alonso
Mañana la sala del Senado comienza la votación en particular del proyecto de reforma tributaria. Según el cronograma del gobierno se espera que esta misma semana, es decir, a más tardar el miércoles, la iniciativa sea aprobada y despachada para que la Cámara de Diputados lo analice en tercer trámite.
El objetivo del gobierno es que en los 10 primeros días de septiembre, los diputados despachen y aprueben el proyecto de ley, así el Ejecutivo alcanzaría a incorporar
US$ 2 mil millones al proyecto de ley del presupuesto 2015, que debe ingresar al Congreso hasta el 30 de septiembre.
Por eso, para el gobierno es clave evitar que los diputados rechacen algunos artículos para no llegar a comisión mixta.
Durante la semana pasada, tanto el ministro de Hacienda, Alberto Arenas, como el subsecretario de Hacienda, Alejandro Micco conversaron con los parlamentarios oficialistas para tratar de incluir ahora, durante la tramitación en el Senado, algunos planteamientos de los diputados.
En esa misma línea, ayer el timonel del Partido Socialista, Osvaldo Andrade instó a los parlamentarios a hacer llegar sus iniciativas durante el segundo trámite constitucional en el Senado y reiteró que existe un acuerdo formal dentro de la Nueva Mayoría para que no sea necesario ir a comisión mixta.
Hoy además, en la reunión de los lunes entre el jefe de las finanzas públicas con los senadores y diputados de la Comisión de Hacienda de ambas cámaras, se enfatizará en la necesidad de aprobar antes del 10 de septiembre el proyecto de reforma tributaria para incluir los recursos a la ley de Presupuestos 2015.
Reacciones
El presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara Alta, Ricardo Lagos Weber (PPD), sostuvo que lo principal es que esta semana “se votara en la sala del Senado un proyecto que cambia de forma estructural cómo se pagan los tributos en Chile. Se recaudará más recursos, por aquellos que les va mejor y ese es el objetivo de este proyecto”, indicó.
En tanto, el senador Andrés Zaldívar (DC) espera que los cambios introducidos “puedan funcionar bien. Hay que dar un plazo para su implementación por parte del SII en todo lo relativo al impuesto a la renta. Hay que reformar y capacitar a SII para que no haya ni evasión ni elusión”, dijo.
Por su parte, el senador Carlos Montes (PS) dijo que “de la Comisión de Hacienda salió un proyecto mejor (...) que rompe con un modelo de privilegios como era el FUT y además termina con varios forados”.
Finalmente, el senador José García Ruminot (RN) aseguró que “hemos aminorado los efectos que considerábamos negativos para la economía chilena”.
El jueves pasado la comisión de Hacienda del Senado despachó el proyecto con algunos ajustes. Entre los principales puntos, en el caso del impuesto a los vehículos se dejará fuera de este gravamen a los autos usados y a los que se utilizan para trabajar. De esta manera se aplicará sólo a los nuevos de uso particular, tanto a diésel como bencineros.
En este punto el ministro Alberto Arenas, hizo hincapié en que “la gran mayoría de la clase media compra automóviles de $ 5 millones hasta $ 8 millones y ahí es muy marginal el efecto; estamos hablando de entre un 1% y 1,2%; es decir, el precio estará variando entre $50.000 y $ 70.000”.
Sobre el impuesto a las bebidas alcohólicas explicó que hubo reducciones en las bebidas analcohólicas, que bajaron de 13% a 10%. A ello, añadió cambios con una nueva fórmula en el impuesto específico a los alcoholes.
Otros de los puntos que se modificaron se relaciona con “los umbrales” que permitirán a las pymes reinvertir sus utilidades en renta fija.