En medio del enrarecido clima político que se ha instalado en la Cámara de Diputados, la Comisión de Constitución decidió solicitar la postergación del plazo para que se constituyan las instancias investigadoras de las platas políticas patrocinadas por el PC y la UDI a fin de poder estudiar con más calma su viabilidad y su eventual fusión. Esto, mientras paralelamente el gobierno está jugado para bajarlas y evitarse la escena de que al menos cuatro ministros sean citados a aclarar las platas de la campaña presidencial.
Hoy vence el plazo para que las bancadas entreguen los nombres de quienes integrarán la llamada comisión Penta y la que pretende indagar los aportes privados a las campañas, sin embargo, después de un largo debate, la Comisión de Constitución acordó solicitar que se amplíe este plazo con el objeto de tener más tiempo para evacuar el informe correspondiente, solicitado por la Sala. De concretarse este proceso, la instancia retomaría el martes 4 de noviembre su labor para concluir ese mismo día o de haber expertos invitados a más tardar el miércoles 5.
Si bien en la discusión los diputados evitaron hablar derechamente de bajar las comisiones, las intervenciones de varios de ellos apuntaron en esa línea, haciendo referencia explícita a que el origen de la creación de las polémicas instancias es derechamente político y que, por lo tanto, es en esa esfera en la que debe resolverse.
El más claro en hacer este planteamiento fue el timonel del PS, Osvaldo Andrade, quien no dudó en argumentar que “ambas son extraordinariamente débiles respecto de su contenido (mandato), pero tienen un sentido político” que apunta “al empate”. Por lo mismo, fue el primero en sugerir que las instancias no se constituyan hasta resolver el tema de fondo: si sus respectivos mandatos están acorde a las facultades que tiene la Corporación en el marco de las comisiones investigadoras.
Andrade fue respaldado en su propuesta por el timonel de RN, Cristián Monckeberg. Este último, sentado junto a su par socialista, continuó la misma línea de argumentación, agregando que “no creo que sea la Comisión de Constitución la llamada a resolver un problema político”, por lo que se sumó a la idea de postergar su constitución puesto que aún existe una “duda razonable” acerca de los mandatos de ambas.
Y mientras esto ocurre en el Congreso, desde la Moneda mueven sus hilos para evitar el desfile de ministros por una comisión investigadora. Una escena que tanto en la Nueva Mayoría como en sectores de la oposición ven con verdadera preocupación por la imagen pública que ello significa.
Desde la UDI, en tanto, el diputado Arturo Squella defiende que la instancia patrocinada por su partido tiene más sustento que la del PC. No obstante, a título personal sostiene que si el argumento para echar abajo ambas instancias es riguroso está dispuesto a aceptarlo. En este escenario, como poniéndose el parche antes de la herida, el gremialismo ya estaría preparando la ofensiva judicial con la presentación de una querella o denuncia en contra de la Fundación Ciudad Justa, creada por el ministro del OOPP Alberto Undurraga (DC).