Por Rodolfo Carrasco M.
Desde que asumió como integrante del equipo programático del comando presidencial de la candidata de la Nueva Mayoría, Michelle Bachelet, el senador Ricardo Lagos Weber (PPD) exhibe una agenda copada de reuniones en el Congreso en Valparaíso y en Santiago, afinando lo que será el programa definitivo de la abanderada y monitoreando la confección de la plantilla parlamentaria tendiente a lograr las mayorías necesarias para acometer los compromisos adoptados por la candidata en su regreso a Chile.
-¿En cuánto cambia la carrera presidencial con la llegada de Evelyn Matthei?
- Desde el punto de vista de Michelle Bachelet eso no debiera afectarnos, al contrario, desde que retomamos la campaña hace unas semanas, Bachelet ha seguido colocando temas en la agenda con estudiantes que han hecho un acto de fe, porque lo que ven es un compromiso, la presidenta habló de contenido. Nuestra campaña no varía, porque el diseño de campaña de Bachelet no será modificado en escuchar y hacer propuestas de contenido respecto a desigualdad, repensar las bases del modelo, nueva mayoría social y política, más allá de la Concertación, porque se requieren 72 diputados y 23 senadores, y ojo que esto no puede hacerse en un período presidencial de cuatro años.
- ¿El estilo de Matthei para algunos anticipa que la campaña será más dura o confrontacional?
- Pero si ya han tratado a la presidenta Bachelet con una dureza enorme desde que dejó el gobierno, desde que estuvo en Naciones Unidas y cuando llegó, la han atacado de todas formas, incluso al decir que estaba enferma, pero ella no se ha perdido y dice “paso, me interesa hablarle a los chilenos”. Si alguien quiere hacer la campaña más dura o agresiva, que lo haga. La pregunta es si va a tener alguien con quien boxear al frente y Michelle Bachelet ha demostrado que no hay que andar boxeando en la vida para demostrar carácter.
- ¿Comparte que se puede ganar en primera vuelta y con los doblajes que pide Bachelet?
- Soy de los que quiere ganar en primera vuelta y estoy trabajando para eso, creo que es posible pero difícil y tal vez habrá segunda vuelta porque hay varios candidatos y una distorsión de votos grande. Lo fundamental para Bachelet no es ganar en primera o segunda vuelta, sino que ganar y, lo segundo, obtener la mayor cantidad de parlamentarios que puedan apoyar los cambios que se requieren. En la parlamentaria vamos a tener un buen resultado, pero no creo que sea posible todos los doblajes que se requieren para tener todos los quórum, pero confío en que parte de la derecha madurará y se llegue a entendimientos para modificar por ejemplo el binominal y entienda que la mayoría gobierne.
- ¿La reciente incorporación de figuras DC al comando de Bachelet podría buscar moderar sus propuestas?
- A nosotros no nos sobra nadie para derrotar la desigualdad y eso requiere hacer reformas estructurales. Pueden ser moderadas o más profundas, pero si se requiere repensar las bases del modelo de desarrollo como lo ha dicho Bachelet, se requieren reformas profundas y estas no tienen por qué estar asociadas con inestabilidad, algo drástico o un paso atrás. Hablar de una reforma educacional y tributaria donde los que tienen más, paguen más es compartido por buena parte de los que integran el comando, así que no creo que tengamos dificultades para generar un programa. La presidenta ha dicho que lo que ya está comprometido como objetivos de campaña y programa de gobierno no tiene marcha atrás, lo que tenemos que ver ahora es la ingeniería de detalle, los plazos y aplicación para no cometer errores, cuatro años pasan rápido y por eso la pregunta clave es si en un gobierno de cuatro años vamos a ser capaces de sentar las bases de lo que debe ser una coalición que se proyectó en el tiempo, no se trata del período de Bachelet, sino que de los próximos ocho años.
-¿Cuándo estará listo el programa definitivo?
-Las comisiones han estado trabajando, son cerca de 30, y esperamos que el programa de la presidenta esté listo en septiembre. Lo que hay ahora son insumos que vamos a trabajar hasta agosto, eso hay que afinarlo y ser sometido a la candidata que lo revisará y eventualmente dará el visto bueno o corregirá y de esa forma esperamos contar en septiembre con el programa, así quedando dos meses para difundirlo en la campaña hasta el 17 de noviembre.
Presupuesto 2014
- ¿Qué espera de la discusión del Presupuesto 2014 que finalmente no se anticipará?
-En algún momento hubo preocupación de cómo compatibilizar la discusión de Presupuesto en medio de la carrera presidencial y que -dependiendo del resultado del 17 de noviembre- puede ser el comienzo de la segunda vuelta y los días previos va a generar un elemento complejo para concentrar recursos humanos. Pero hemos establecido un cronograma que permite abordar bien el Presupuesto. Entre el 30 de septiembre y el 18 de octubre viene el trabajo de comisiones, luego un receso y después de la primera vuelta el trabajo de mixta y salas.
Veremos que haya un fondo de libre disposición para la próxima administración, pero la mayor preocupación es el estado de la hacienda pública que vaya a recibir el futuro gobierno. Me preocupa que este gobierno recibió un déficit estructural del 1,7% y lo va a entregar con 1,2%, o sea, va a hacer un esfuerzo modesto a la hora de tener un equilibrio estructural en las cuentas públicas. Tenemos un gasto que no se condice con nuestros niveles de ingresos. Nos queda tratar de conseguir el presupuesto más responsable, pero permitiendo que el futuro gobierno tenga holgura para llevar a cabo su programa. En un gobierno de cuatro años, los dos primeros son fundamentales.
-¿Pero el ministro de Hacienda dice que el gobierno ha mejorado la situación que heredó?
-Al ver la exposición de la directora de Presupuestos, hace unas semanas ante la comisión mixta, hizo una corrección a la baja del crecimiento de 4,8% a 4,6% y el gasto no lo ajustan. Dígame, ¿cómo la economía va a crecer menos y el gasto sigue igual? Se financia con deuda pública, que en este gobierno ha pasado de 5,8% en 2009 a 12,8% en 2012, no cuadra la caja. Con el precio más alto del cobre en décadas, es decir los más altos ingresos, creo que el ministro se queja de lleno. Esto es un problema de gestión y no ha existido un esfuerzo para balancear las cuentas fiscales.
Censo: "El último clavo en el ataúd de la credibilidad del gobierno"
- ¿Que lección saca de lo ocurrido en el Censo?
- Me preocupa lo que se genera en Chile, se produce una desconfianza en las instituciones en algo que era muy serio como el INE, que queda definitivamente amenazado en su credibilidad. Vamos a tener todos que hacer un esfuerzo para recuperar la credibilidad de esta institución. Esto, además tiene un costo de imagen internacional, si esto hubiera ocurrido años antes de ingresar a la OCDE tal vez no nos hubieran invitado a ser parte de este foro, porque si hay algo que se valora en Chile es la seriedad con que llevamos nuestras cuentas públicas, que son esenciales en el sistema de la OCDE. Cuando se comenzó a hacer el Censo de 2012 en la administración anterior se inició con la idea de un censo de hecho y este gobierno decidió en 2011 cambiar ese esquema. A todas luces, luego de ver el informe de los expertos, queda claro que se improvisó.
- ¿Comparte pedir una nueva opinión internacional?
- Están en su derecho, pero es mejor que la hubieran pedido desde el día uno o establecido una comisión mixta de chilenos y extranjeros, es como no creerle a los nacionales. Mejor es abocarnos a arreglar lo que tenemos. Esta información es vital para asignar los recursos en Chile como los del Fondo Común Municipal. Este será un problema que se va a heredar a las próximas administraciones, es un tema país. Rescato que el presidente reconociera el error a 24 horas de darse a conocer. De todas formas esta situación es casi el último clavo en el ataúd del gobierno en materia de credibilidad y entrega una enseñanza de ser humilde y no arrogante. Se decía que era el mejor censo de la historia, que era un gobierno de excelencia, de 24/7, del pendrive y miren lo que pasó.
"La magia de las elecciones"
- ¿Qué le parece la discusión del sueldo mínimo?
- Esto comenzaba a regir habitualmente en julio. Este año ocurrió algo increíble. Para celebrar su tercer año de gobierno el presidente Piñera decide hacer cadena nacional para anunciar $ 205 mil a mediados de marzo, pero ni los propios parlamentarios de gobierno lo apoyaron. Pasamos luego con $ 207 mil y tampoco; y luego viene con $ 210 mil. Dos reflexiones: este proyecto se presentó en marzo en vez de junio y se está aprobando cinco meses después, tiene un récord este gobierno que discutió todo este tiempo el sueldo mínimo y aún no termina.
Lo otro es que alguien me explique por qué no se podían dar $ 210 mil en marzo y sí en agosto. Eso tiene una explicación: la magia de las elecciones. Hay que apoyar a la candidata Matthei y no hay que pasar bochornos, porque no creo que el escenario externo que pintó el ministro de Hacienda en marzo haya mejorado como para dar este salario sin generar consecuencias económicas indeseadas.
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