Firma mexicana busca levantar dos fondos de capital de riesgo corporativo en Chile
Bluebox, que asesora a grandes compañías en Corporate Venture Capital (CVC), proyecta invertir en unos 30 emprendimientos con foco en logística y alimentos en tres años.
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La empresa mexicana Bluebox, que asesora a grandes compañías en Corporate Venture Capital (CVC), conectando demanda de empresas con startups tecnológicas, busca levantar dos fondos de inversión enfocados en los sectores de alimentos y logística, con una proyección de operación de tres años.
La firma anunció que en los próximos meses comenzará a reclutar a las empresas aportantes -chilenas y mexicanas- para crear dos fondos de inversión de riesgo corporativo de US$ 5 millones cada uno. El plan es financiar entre 12 y 15 startups con foco en logística e igual número en alimentos, con tickets de entre US$ 100 mil y US$ 250 mil.
Juan Pablo Sánchez, cofundador de Bluebox y actual COO, cuenta que la finalidad de estos fondos es establecer un puente entre Chile y México, y que las empresas vayan tomando posesión de a poco en las startups para que sean socios y tengan crecimiento en conjunto.
"Nuestro objetivo es trabajar con, al menos, los 10 corporativos más importantes en Chile, para que estos generen ecosistemas de innovación y se vinculen con la mayor cantidad de emprendedores nacionales e internacionales", señala Sánchez.
Actualmente, la firma ya tiene un fondo enfocado en PropTech por US$ 5 millones, con el que han invertido en empresas chilenas; una de ellas fue Comunidad Feliz, que llegó al mercado mexicano y busca consolidarse en la región como líderes en la administración de comunidades en desarrollos inmobiliarios.
Autónomos
Bluebox comenzó a operar en Chile en 2019 apalancado con fondos de Corfo. No obstante, en esta nueva etapa buscan operar en forma autónoma, para lo cual invertirán US$ 1 millón en un plan de escalamiento para emprendimientos nacionales.
Sánchez comenta que el ecosistema chileno lo conoce hace más de seis años, cuando iniciaron viajes de exploración para encontrar "las mejores startups" y llevarlas al mercado mexicano con los corporativos más importantes, como Cinepolis o Bimbo.
"Durante ese tiempo hicimos muchos viajes a Chile y formamos una red de contactos importante, por lo que en 2019 optamos por construir un polo de desarrollo y así generar un canal directo de colaboración entre Chile y México. Para eso participamos de una de las convocatorias de escalamiento de Corfo y fuimos beneficiados por una inversión cercana a los US$ 400 mil durante estos años", cuenta Sánchez.
Este diciembre de este año termina el financiamiento de Corfo y decidieron no postular a la renovación y seguir solos. Estos recursos les permitieron instalarse y construir una base de inversionistas y clientes.
"Corfo fue un excelente aliado en este proceso de softlanding. Vamos a seguir colaborando con ellos, pero sin sus recursos económicos para que esos fondos gubernamentales incentiven a otros en apoyar al ecosistema emprendedor", explica Sánchez.
Según el cofundador de Bluebox, en estos tres años han vinculado cerca de 150 startups chilenas con grandes compañías mexicanas, colombianas y chilenas. De ellas, 16 han tenido algún proceso de relación comercial, recibiendo pagos o convirtiéndose en sus proveedores.