El ministro de Hacienda de Brasil, Joaquim Levy, dijo ayer que la presidenta Dilma Rousseff quiere acercase cada vez más al sector privado. El secretario de Estado se encuentra en Nueva York con inversionistas en preparación de una visita de la mandataria, fijada para fines de junio.
"La presidenta Dilma vendrá a Estados Unidos y ella también quiere aproximarse a al sector económico. Es muy importante para las empresas brasileñas, que cada vez sienten más los efectos de Estados Unidos".
Levy destacó que el ministro de Desarrollo, Armando Monteiro Neto, "realizó una aproximación con un área muy importante para nosotros que es la de facilitación del comercio", detalló. La ministra de Agricultura, "Katia Abreu también hizo un trabajo importante para mejorar las condiciones de la pecuaria brasileña".
El titular de Hacienda también explicó que el gobierno tiene que continuar perseverando para cumplir la meta de inflación. "La meta de 4,5% tiene que ser un objetivo que tenemos que perseguir mucho para 2016. Nosotros vamos a llegar a ella y el mercado está viendo cada vez más que realmente es posible tener una inflación dentro de la meta", dijo el ministro a la salida de su encuentro con inversionistas.
Para Levy, ese esfuerzo para cumplir la meta es sumamente importante. "Eso cambia la percepción de los agentes económicos, sobre las presiones a la capacidad de Brasil de tener crecimiento con inflación más baja".
El ministro resaltó también que el objetivo del gobierno es converger hacia el centro de la meta. "Es un esfuerzo para converger. Hoy estamos más cerca de la meta. El (boletín) Focus de 2016 está en un poco más de 5%. Nosotros podemos hacerlo mejor que eso. La gente tiene que seguir perseverando, tiene que completar el ajuste fiscal, el Congreso debe votar para completar todas estas etapas y que Brasil vuelva a crecer".
Nueva ley duplicaría trabajadores tercerizados
La nueva ley de tercerización para las actividades de las empresas que impulsa el gobierno podría llegar a duplicar el número de trabajadores tercerizados en Brasil, actualmente en
12 millones, entre los casi 50 millones de trabajadores que hoy cuentan con contrato formal.
La posibilidad de contratar a funcionarios de otras empresas para realizar tareas ligadas al giro principal de una compañía es uno de los aspectos del proyecto aprobado el 8 de abril que ha sido más atacado por los grupos contrarios a la medida, y cuyas posibles modificaciones serán votadas mañana.
Sus defensores, en cambio, afirman que la ley corregirá vacíos en el reglamento actual, que sólo permite la tercerización de las actividades menores y dará mayor seguridad jurídica a los contratos de prestación de servicios. Según datos del Reporte Anual de Información Social 2013, cerca de 50% de los empleos formales en Brasil pagan hasta dos salarios mínimos y 33% están ocupados por personas que no completaron su educación secundaria.