David Cameron se reunió ayer con importantes autoridades para evaluar planes de contingencia en caso de implosionar el euro, luego que los rendimientos de bonos españoles entraran en zona de peligro.
Debido a la crisis bancaria en España y la incertidumbre en Grecia, Cameron debatió con el jefe del Banco Central, Mervyn King, y la máxima autoridad reguladora, Adair Turner.
El gobierno informó que la reunión había sido planeada con anticipación, pero su meta era “asegurar que el Reino Unido esté preparado para lidiar con la situación de la eurozona”.
Luego del rescate por 19.000 miIlones de euros al banco español Bankia, los intereses de la deuda ibérica a 10 años alcanzaron 6,5%, cercano al nivel de 7% que causó los rescates de Grecia, Portugal e Irlanda.
Aún así, ayer el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, insistió que los bancos locales no necesitarán un rescate internacional.
En Londres, los bancos han sido instados a evaluar las implicancias legales y financieras de diversos escenarios -que van desde la salida de Grecia de la eurozona al default de países más grandes- y explicar a las autoridades cómo planean enfrentarlos.
El Ministerio del Interior debate cómo ayudar a los turistas británicos en Grecia si los cajeros se quedan sin efectivo o si una interrupción de los ferries los deja varados en las islas helenas.
La ministra del Interior, Theresa May, no ha descartado suspender las reglas de libre movimiento de la UE si una crisis desata una migración a gran escala.
Rajoy advirtió que Bankia, el segundo banco español, hubiera colapsado si Madrid no lo hubiera rescatado la semana pasada.