Merkel defiende las reformas dolorosas

Por Gerrit Wiesmann en Berlín

Anoche, Angela Merkel convocó a los socios de la eurozona a un proceso largo y doloroso de reformas estructurales para restaurar el crecimiento económico que la eurozona necesita para superar la crisis de duda.

La canciller alemana también resaltó que reformar a Grecia fuera de la eurozona no era una opción.

“No participaré en sacar a Grecia de la eurozona”, dijo. Una salida de la eurozona “no está en discusión”.

Durante un discurso en Berlín sobre el futuro de Europa, Merkel rememoró las reformas del mercado laboral de su antecesor, Gerhard Schröder, las que recortaron el desempleo alemán de más de 5 millones en 2003 a menos de 3 millones actualmente.

Aunque las reformas eran impopulares en ese entonces, esta tendencia mostró que “el cambio puede traer algo bueno” y hacer las cosas mejor incluso para aquellos que se oponían inicialmente.

Con su énfasis en la reforma estructural, la canciller estaba tratando de contrarrestar las críticas a su manejo en la crisis de la eurozona, la que algunos socios del bloque piensan que se ha enfocado mucho en la austeridad en vez del crecimiento.

“Pero buenas políticas presupuestarias y crecimiento no deberían ser esgrimidas en contra de unos y otros”, dijo Merkel.

La canciller señaló que las finanzas públicas sustentables estaban fundadas sobre la actividad económica y los empleos, los que traen ingresos tributarios.

Pero pelear contra la crisis del euro no era simplemente sobre consolidación presupuestaria, sino que sobre la pregunta fundamental de si los países estaban preparados para “vivir sosteniblemente”, lo que involucra finanzas públicas prudentes y una economía vibrante.

Los mercados financieros pueden a veces tener dudas sobre este proceso, dijo la canciller. Pero la eurozona no tenía alternativa, excepto perseverar porque continuar como antes sólo haría al bloque insustentable.

Merkel dijo que la situación en Grecia es “muy complicada” y no ayudaban las estructuras políticas anquilosadas ni un mercado laboral inflexible, en el que mucha gente encontraba que las oportunidades de trabajo estaban cerradas para ellos.