La economía de gran parte de EE.UU. se
debilitó a finales de abril y en mayo, por la ralentización del
consumo con la subida de los precios del crudo y los alimentos, y el
endurecimiento del crédito, informó hoy la Reserva Federal.
Siete de los 12 distritos en los que el organismo divide el país
dijeron que la actividad económica en sus zonas se frenó en ese
período, mientras que el resto describió las condiciones como
"estables".
La Reserva Federal (Fed) divulgó ese análisis en el llamado
"libro beige", que sintetiza la evaluación de los bancos regionales
de la situación económica en su región.
A nivel nacional, el banco central calificó la economía de
Estados Unidos como "generalmente débil".
"El gasto de consumo se ralentizó desde el informe anterior
porque los ingresos sufrieron el pellizco del aumento de los precios
de la energía y los alimentos", explicó el documento.
El consumo supone casi el 70% de la actividad económica
del país.
Los concesionarios de automóviles sintieron el golpe
especialmente y registraron unos resultados "débiles", según la
Reserva Federal.
En algunos distritos cayeron las ventas de camionetas y vehículos
monovolumen, grandes consumidores de gasolina, mientras que subieron
las de automóviles híbridos y de bajo consumo.
La debilidad económica también se sintió en el sector
manufacturero, que sufrió la baja demanda de productos relacionados
con la construcción, pero se benefició de un aumento de las ventas
para la exportación, especialmente de equipamiento agrícola, de
transporte, del sector energético y acero, indicó la Fed.
El informe constata un aumento "generalizado" de los precios de
los insumos, que algunas empresas han podido pasar al consumidor con
una subida de los productos finales.
Al mismo tiempo, las presiones para obtener subidas de salarios
fueron "moderadas o limitadas", pues el mercado laboral ha
empeorado.
De acuerdo con el informe, la crisis del sector de la vivienda no
da señales de alivio. Los precios cayeron a finales de abril y en
mayo en buena parte del país y en ciertos distritos algunos
compradores potenciales no pudieron obtener hipotecas.
Eso se debe a un endurecimiento de las condiciones de los
créditos no sólo hipotecarios, sino también para el consumo -como
tarjetas de crédito- y para las empresas, un fenómeno que es
generalizado en todo el país, según la Reserva Federal.
El Comité del Mercado Abierto del banco central tendrá en cuenta
este informe durante su reunión del 24 y 25 de junio, en la que
fijará la política monetaria del país.
Los analistas esperan que no se produzcan cambios en los
intereses, después de que el presidente de la Reserva, Ben Bernanke,
alertara del peligro de que se eleven las expectativas de inflación.