Despojan a administradora de pensiones de Carlos Slim de cartera de US$ 860 millones

Los reguladores mexicanos están despojando al Grupo Financiero Inbursa, que pertenece hombre más rico del mundo según Forbes, el mexicano Carlos Slim, de cuentas de pensión por un valor de 10.900 millones de pesos mexicanos (US$ 860 millones) después de que el fondo de pensión presentara los peores retornos en el país.

Los cinco fondos de la unidad de pensiones tuvieron un desempeño peor que el de sus pares en los 36 meses que culminaron en diciembre, según datos de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar). Los fondos tuvieron un retorno promedio de 7,31%, comparado con una ganancia de 11,51% para todo el sistema. Los activos de Inbursa cayeron a 99.600 millones de pesos mexicanos el 1 de febrero desde 110.500 millones de pesos mexicanos el 27 de enero, después de que el regulador reasignara las cuentas de pensión a fondos con mejor desempeño.

Las afores de Slim, como se conocen a los fondos de pensión, no aprovecharon un alza en los bonos en pesos mexicanos a más largo plazo alimentada por la especulación de que el banco central logrará mantener controlada la inflación. Los fondos de Inbursa concentran sus inversiones en títulos a más corto plazo que se benefician menos de los pronósticos de tasas estables. Al 31 de diciembre, sus fondos para trabajadores de 60 años o más estaban invertidos en instrumentos a 2,2 años promedio, comparado con 9,1 años en la industria.




Esperando el alza de tasas


Inbursa, que tenía más del 50% de sus activos de pensiones en títulos a corto plazo en 2007, no ha invertido en deuda a tasa fija a más largo plazo por sus expectativas de que las tasas de interés aumentarán, comentó Marco Antonio Slim, director ejecutivo de Inbursa. “Nuestra estrategia no se basa en la comodidad de ser igual al mercado en el corto plazo, si no que en la convicción de que al momento de la jubilación, la Afores con el mayor balance para los trabajadores es Inbursa”, acotó.

Algunos analistas creen que efectivamente los fondos como Inbursa, que invierten en deuda a corto plazo, se beneficiarán si el banco central eleva las tasas en los próximos seis meses. Sin embargo el instituto emisor ha dado señales de que no lo hará hasta marzo de 2013.

Inbursa perdió activos de fondos de pensión por 10.700 millones de pesos mexicanos después de que concluyera el primer proceso de reasignación bianual el 1 de febrero, cuando Consar transfirió cuentas que no habían sido registradas de los fondos con bajo desempeño a aquellos con mejores retornos. Perdió otros 200 millones de pesos en activos ese mismo día cuando Consar puso fin a una transferencia anual de cuentas que aguardaban ser asignadas o que se habían vuelto inactivas.