El presidente estadounidense,
George W. Bush, afirmó hoy que un país como Irán con armas nucleares sería
"increíblemente peligroso para la paz mundial", pero se mostró
dispuesto a continuar trabajando por una solución pacífica del
programa atómico de ese país.
Bush, en una conferencia de prensa tras una cumbre con los
principales líderes de la Unión Europea (UE), respaldó el viaje que
el alto representante europeo, Javier Solana, realizará a Teherán
dentro de pocos días en nombre del "Grupo de los Seis" para tratar
de reabrir las negociaciones nucleares con el régimen islámico.
La UE y EE.UU. señalaron en esta cumbre su disposición a aumentar
las sanciones contra Irán si este país no cumple sus compromisos
internacionales y renuncia a sus actividades nucleares.
"Esperamos que Irán cumpla sus obligaciones acerca de sus
actividades nucleares, incluida la suspensión completa y verificable
de su enriquecimiento" de uranio, afirma la declaración conjunta de
la cumbre.
Bush afirmó que ha llegado el momento de la "diplomacia fuerte" y
de que el "Grupo de los Seis" envíe "un mensaje firme" a Teherán
para que coopere con la comunidad internacional y sea sincero y
ponga fin al obstruccionismo sobre sus actividades atómicas.
Recordó que Irán no ha sido sincero con el Agencia Internacional de la Energía Atómica en sus
actividades de enriquecimiento de uranio y "no se puede confiar" en
el régimen de ese país en ese aspecto.
Bush también habló de Cuba, y afirmó que si el Gobierno de Raúl
Castro "es diferente" debería demostrarlo poniendo en libertad a los
prisioneros políticos.
El presidente estadounidense, en esta su última cumbre con la UE
antes de abandonar su cargo en enero de 2009, reconoció que "hay
problemas" en la relación entre Washington y Bruselas, aunque
insistió en que "hay más cosas que nos unen que las que nos
separan".
"No dejemos que esas diferencias nos separen de forma
permanente", recalcó Bush, quien en su segundo mandato volvió a una
política multilateralista frente al unilateralismo de sus primeros
cuatro años en la Casa Blanca.