Internacional
Agencias calificadoras cosechan suculentas ganancias en medio de la incertidumbre global
Tanto Standard & Poor’s como Moody’s siguen siendo cuestionadas por su rol en los vaivenes de los mercados.
Por: | Publicado: Martes 16 de agosto de 2011 a las 05:00 hrs.
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Por María Ignacia Alvear c.
Las agencias calificadoras han estado en el ojo del huracán desde comienzos de la crisis financiera de 2008. A ellas se les sindica como responsables de inflar los grados para títulos riesgosos (lo que habría dado paso a la debacle), de dar el puntapié inicial para la crisis de deuda de la eurozona con el recorte de la nota de Grecia, y ahora último de la rebaja de la calificación de crédito de EEUU, la primera en su historia, lo que hizo que los mercados se desplomaran durante varios días.
Sin embargo, el ser altamente cuestionadas por su rol no les impidió registrar alzas en sus resultados en el segundo trimestre de este año. Más aún, las tan criticadas calificaciones que entregan fueron el motivo de que sus ganancias se dispararan, ya que se incrementaron las demandas por calificaciones al tiempo que las compañías toman ventaja de las tasas de interés a mínimos históricos para refinanciar deuda.
La agencia Moody’s registró ganancias en el segundo trimestre por US$ 189 millones, desde los US$ 121 millones del mismo período del año anterior, lo que representa un alza de 56% gracias a que las compañías vendieron más bonos que lo usual en abril y mayo, elevando las utilidades de la firma.
“Los resultados del segundo trimestre de Moody’s reflejan las ganancias en todas las áreas de calificación de créditos. Esperamos condiciones de emisión de deuda más desafiantes en EEUU y Europa en el segundo semestre de 2011”, comentó a Bloomberg el analista de Evercore Partners, Douglas Arthur.
Por otro lado, McGraw-Hill, dueña de S&P, vio subir sus utilidades un 10% a US$ 211,1 millones desde los US$ 191,1 millones del segundo trimestre de 2010, un resultado que fue impulsado gracias al buen desempeño de la agencia calificadora, la que representa cerca del 70% de las ganancias operacionales anuales de McGraw-Hill, según el analista de Piper Jaffray & Co. Peter Appert.
Las acciones de Moody’s han subido 41% este año, mientras que McGraw-Hill han escalado 21%. Según datos compilados por Bloomberg, el desempeño de ambas firmas durante este año superan al del índice S&P 500, incluso después de que registraron mayores pérdidas que el mismo índice, que cayó 6,7% el lunes 8 de agosto, tras saberse de la rebaja en la nota de EEUU.
Bajo la lupa
Las autoridades estadounidenses están criticando duramente a S&P debido a que la agencia habría incurrido en un error matemático “de consecuencia significativa” (se habría equivocado en US$ 2 billones en sus proyecciones sobre el déficit presupuestario hacia 2021) al momento de calificar la situación de EEUU, mientras que la firma se defiende diciendo que no fue un error sino que simplemente un cambio que no afectó en la decisión final del recorte del rating.
La Comisión de Bolsa y Valores de EEUU (SEC, su sigla en inglés) se está aferrando a la regulación financiera, conocida como ley Dodd-Frank, para exigirles a las agencias que revelen información de manera regular sobre sus controles. Además, el Congreso también tiene a las agencias bajo la lupa, ya que hay comisiones que están investigando su rol desde la crisis de 2008.
Por otra parte, un tribunal italiano está acusando a analistas de las agencias S&P y Moody’s de “manipulación del mercado” y de abuso “de información privilegiada” por haber elaborado y difundido en mayo, junio y julio de 2011 noticias e informes “incorrectos” o “exagerados” sobre la sostenibilidad del sistema económico y bancario italiano.
Las agencias calificadoras han estado en el ojo del huracán desde comienzos de la crisis financiera de 2008. A ellas se les sindica como responsables de inflar los grados para títulos riesgosos (lo que habría dado paso a la debacle), de dar el puntapié inicial para la crisis de deuda de la eurozona con el recorte de la nota de Grecia, y ahora último de la rebaja de la calificación de crédito de EEUU, la primera en su historia, lo que hizo que los mercados se desplomaran durante varios días.
Sin embargo, el ser altamente cuestionadas por su rol no les impidió registrar alzas en sus resultados en el segundo trimestre de este año. Más aún, las tan criticadas calificaciones que entregan fueron el motivo de que sus ganancias se dispararan, ya que se incrementaron las demandas por calificaciones al tiempo que las compañías toman ventaja de las tasas de interés a mínimos históricos para refinanciar deuda.
La agencia Moody’s registró ganancias en el segundo trimestre por US$ 189 millones, desde los US$ 121 millones del mismo período del año anterior, lo que representa un alza de 56% gracias a que las compañías vendieron más bonos que lo usual en abril y mayo, elevando las utilidades de la firma.
“Los resultados del segundo trimestre de Moody’s reflejan las ganancias en todas las áreas de calificación de créditos. Esperamos condiciones de emisión de deuda más desafiantes en EEUU y Europa en el segundo semestre de 2011”, comentó a Bloomberg el analista de Evercore Partners, Douglas Arthur.
Por otro lado, McGraw-Hill, dueña de S&P, vio subir sus utilidades un 10% a US$ 211,1 millones desde los US$ 191,1 millones del segundo trimestre de 2010, un resultado que fue impulsado gracias al buen desempeño de la agencia calificadora, la que representa cerca del 70% de las ganancias operacionales anuales de McGraw-Hill, según el analista de Piper Jaffray & Co. Peter Appert.
Las acciones de Moody’s han subido 41% este año, mientras que McGraw-Hill han escalado 21%. Según datos compilados por Bloomberg, el desempeño de ambas firmas durante este año superan al del índice S&P 500, incluso después de que registraron mayores pérdidas que el mismo índice, que cayó 6,7% el lunes 8 de agosto, tras saberse de la rebaja en la nota de EEUU.
Bajo la lupa
Las autoridades estadounidenses están criticando duramente a S&P debido a que la agencia habría incurrido en un error matemático “de consecuencia significativa” (se habría equivocado en US$ 2 billones en sus proyecciones sobre el déficit presupuestario hacia 2021) al momento de calificar la situación de EEUU, mientras que la firma se defiende diciendo que no fue un error sino que simplemente un cambio que no afectó en la decisión final del recorte del rating.
La Comisión de Bolsa y Valores de EEUU (SEC, su sigla en inglés) se está aferrando a la regulación financiera, conocida como ley Dodd-Frank, para exigirles a las agencias que revelen información de manera regular sobre sus controles. Además, el Congreso también tiene a las agencias bajo la lupa, ya que hay comisiones que están investigando su rol desde la crisis de 2008.
Por otra parte, un tribunal italiano está acusando a analistas de las agencias S&P y Moody’s de “manipulación del mercado” y de abuso “de información privilegiada” por haber elaborado y difundido en mayo, junio y julio de 2011 noticias e informes “incorrectos” o “exagerados” sobre la sostenibilidad del sistema económico y bancario italiano.